Las autoridades meteorológicas colombianas bajaron de rojo a naranja el nivel de alerta que había emitido el domingo para los ríos próximos al volcán Nevado del Ruiz (centro-oeste), que amenaza con erupción, debido a las fuertes lluvias en la zona.
"En la madrugada del lunes 9 de abril, los niveles (de los ríos) registran una tendencia al descenso lento, por lo cual, se baja el nivel a alerta naranja", indicó el estatal Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam).
El Ideam había declarado el domingo la alerta roja debido a las lluvias presentadas entre viernes y sábado, "que generaron un ascenso en los niveles de los ríos, especialmente el Lagunillas (departamento de Tolima) en el cual se presentó una creciente súbita", recordó el informe.
"Estas condiciones son fluctuantes y están asociadas a la presencia de altas pendientes y de fuertes lluvias en el área del volcán, por esta razón se presentan ascensos súbitos y de igual manera bajan rápidamente sus niveles", explicó el Ideam.
El volcán Nevado del Ruiz, situado entre los departamentos de Caldas y Tolima (centro-oeste), ha presentado en los últimos días un incremento de su actividad sísmica por lo que el 31 de marzo se elevó de amarillo a naranja el nivel de alerta en su zona de influencia.
Este lunes la actividad sísmica en el volcán continuaba, indicó Gloria Patricia Cortés, directora del Observatorio Vulcanológico de la ciudad de Manizales (capital de Caldas).
"En las últimas horas, en la tarde de ayer (domingo) y el amanecer (de este lunes), el volcán Nevado del Ruiz continúa presentando el mismo parámetro de actividad en general, de inestabilidad, básicamente en la parte sísmica y salida de gases", puntualizó.
El 13 de noviembre de 1985 el volcán Nevado del Ruiz entró en erupción y ocasionó un deshielo del cráter Arenas, lo que a su vez provocó el crecimiento del río Gualí que, desbordado, arrasó con la población de Armero (Tolima) provocando la muerte a cerca de 20.000 de sus 29.000 habitantes.
La avalancha causó la muerte a otras 3.000 personas de poblaciones aledañas al volcán.
Pese a la reducción de la alerta sobre los ríos de la zona, el Ideam recomendó a las autoridades locales "no bajar la guardia y seguir atentos a nuevos eventos en aquellos días que se presenten lluvias fuertes".
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