El mandatario confiesa que "teme por la vida" de todos los habitantes de la zona de riesgo, y ese sentimiento ha motivado a hacerse "fuertes" durante estas semanas que llevan preparándose para una posible emergencia, con el apoyo del Gobierno Nacional que ha hecho su aporte ante la inminente erupción.
"Frente a una tragedia de esta naturaleza nadie está preparado en ninguna parte del mundo. No podemos darnos el lujo de evacuar ahora todo el norte de Tolima porque ni el Gobierno Nacional ni nosotros tenemos los recursos. La opción es esperar y tener listas las rutas de evacuación. Estamos listos para evacuar apenas suenen las alarmas", explicó Delgado Peñón.
El mandatario indica, en ese sentido, que aunque la situación es inminente, no saben de qué magnitud podría ser la explosión y por ende, no sabría cuántas personas se pueden ver afectadas.
"Realmente para los tolimenses y para el Gobierno es una situación absolutamente irregular. Lo que está ocurriendo es que las personas que viven en las regiones aledañas al Ruiz tienen la cultura de la permanencia, del riesgo, cueste lo que les cueste. Nos estamos dedicando a explicarles con los organismos de socorro que deben estar pendientes de las alertas y así puedan evacuar", dijo el gobernador Delgado.
Agregó que en los planes de contingencia han venido trabajando desde hace dos semanas y que por esa razón ya están dispuestas escuelas y polideportivos en 15 municipios, además de ayuda humanitaria y agua potable en caso de que llegue a faltar.
"La evacuación de la zona será en transporte aéreo y terrestre. Por eso tenemos equipos de maquinaria trabajando en la zona aledaña al volcán para que las carreteras por donde se va a realizar la evacuación estén en buen estado y las personas salgan rápidamente a los diferentes sectores donde van a ser atendidos", puntualizó el gobernador.
Sin cambios en actividad
Según informó ayer el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Manizales, el volcán continúa con una actividad "inestable" y no amerita un cambio en la alerta.
Gloria Patricia Cortés Jiménez , coordinadora técnica del Observatorio, le dijo a Colprensa que no se reportan cambios desde el punto de vista técnico y que siguen en amenaza las poblaciones ribereñas a los ríos Gualí, Azufrado, Lagunilla, Río Recio, y parte de Chinchiná.
"Sabemos que tenemos que asumir la situación de una posible erupción y se requiere que las personas se preparen para alejarse de los ríos, por supuesto tomando las acciones preventivas, hacer caso a las medidas que se dan, a la información de evacuaciones para no repetir la historia", indicó Patricia Cortés.
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