domingo, 1 de abril de 2012

DOS INCENDIOS ACTIVOS EN CANTABRIA

El balance diario de incendios forestales es cada vez más pequeño, y se minimizan las posibilidades de que la situación se recrudezca, más cuando las previsiones del tiempo hablan ya de nubes para hoy, bajada de temperaturas para mañana y lluvia a partir del martes. Según el último parte del Gobierno de Cantabria -que el viernes desactivó la alerta de incendios después de cuatro días-, ayer a última hora de la tarde quedaban dos incendios activos en la región, en Valdáliga y Soba. Entre el viernes y el sábado se registraron 19, de los cuales 17 ya fueron extinguidos.
En el de Ancillo (Soba), interviene una cuadrilla forestal, el helicóptero del 112 y técnicos del medio natural (TAMN), mientras que en el de Bustriguado (Valdáliga), actúa el helicóptero de la BRIF (Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales), y los TAMN.
 pesar de que la situación ha mejorado, el Gobierno de Cantabria mantiene el 100% de sus efectivos operativos: 412 componentes entre técnicos y operarios de Montes, TAMN, emisoristas, miembros del 112, dos cuadrillas de Tragsa, equipos de brigadas helitransportadas y técnicos adscritos a la Administración central.
Una vez desactivado el nivel 1 del Plan Especial de Protección Civil de Cantabria sobre Incendios Forestales, los 106 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) abandonaron la región, y el delegado del Gobierno, Samuel Ruiz, agradeció su colaboración al teniente coronel César Gutiérrez.
Los más graves
Ruiz recordó que, desde el día 27 hasta el día 30, los 106 efectivos de la UME actuaron en cinco de los incendios más graves: en Los Corrales de Buelna, en La Lastra, Puentenansa, Cabrojo y Santotís, apoyados con 24 vehículos.
El de Los Corrales (día 27) tenía cuatro focos independientes. La orografía y la falta de caminos dificultaron el acceso por tierra a tres de los focos, en los que hubo que actuar con medios aéreos. La UME realizó una extinción directa sobre el fuego en el foco del Suroeste.
En La Lastra (día 28), comenzó al Sur de la localidad y se extendió hacia el Norte. Pudo ser detenido sobre la carretera CA-281, aunque la proximidad del fuego y el denso humo obligaron a cortarla. La UME tuvo que realizar una quema controlada al Norte del incendio para evitar poner en peligro la población.
En el de Puentenansa (día 28) el fuego se originó cerca del pueblo y afectaba a una repoblación de gran importancia para el pueblo que pudo ser preservada. Fue extinguido hora y media después. En cuanto al de Cabrojo, (día 29) se situó a dos kilómetros del pueblo, avanzando por una ladera monte arriba. Se extinguió con ataque directo con autobomba y herramienta manual en las zonas de difícil acceso.
Por último, en el de Santotís (29), el terreno era sumamente abrupto y la extinción se hizo manualmente apoyada por un helicóptero.
EA2CPG