La oficina meteorológica detallan que desde última hora del martes se ha registrado más de medio metro de precipitaciones, un récord para el mes de julio desde 1907. Asimismo pronostica que las intensas lluvias podrían continuar hasta el viernes.
Muchos de los puentes sobre el río Han, que atraviesa el centro de Seúl, permanecen cerrados, mientras que los servicios ferroviarios han quedado interrumpido. Las autoridades calculan que más de 4.500 personas han tenido que abandonar sus hogares. Muchas viviendas y un distrito financiero continúan sin suministro eléctrico.
Hay en marcha una operación de rescate para salvar a cuatro personas atrapadas en un monasterio budista, donde se ha producido un desprendimiento de tierra.
En el suceso más grave de todos los ocurridos, trece personas murieron cuando la tierra que se desprendió de una montaña cayó sobre un centro vacacional en Chuncheon, al este de la ciudad, y destruyó tres pequeños hoteles.
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