La ola de frío que sacude América del Sur desde la semana pasada ha dejado cuatro muertos en las últimas horas, tres en Argentina y uno en Uruguay, y ha llegado acompañada de lluvias hasta el norte de Chile, donde hay 5.000 evacuados. Las víctimas más recientes se produjeron en Argentina, donde la Policía informó hoy de que un matrimonio septuagenario de la provincia de Buenos Aires y un hombre de la norteña provincia de Jujuy murieron por hipotermia. Con estas muertes subieron a cuatro los fallecidos en el país a consecuencia de las bajas temperaturas, a los que se suman al menos otras siete personas que perdieron la vida por intoxicación con gases de monóxido de carbono, producto de la mala combustión de los sistemas de calefacción.
Una familia completa de la sureña provincia de Chubut, el matrimonio y sus dos hijos de 2 y 11 años, son los últimas víctimas de los gases tóxicos. Según la organización no gubernamental Red Solidaria, cada año perecen en Argentina entre 80 y 100 personas por hipotermia o por inhalación de monóxido de carbono. Las bajas temperaturas también han causado escasez de combustible en varias provincias del país debido a un aumento récord del consumo de energía, que tuvo su culmen el lunes pasado por la noche, con la cifra histórica de 21.403 megavatios.
En Uruguay, la ola de frío polar agravó las condiciones meteorológicas de esta época y causó la muerte por hipotermia en las últimas horas de un hombre de 69 años que vivía en condiciones precarias en el departamento de Durazno, al norte de Montevideo, y la de un indigente el fin de semana pasado.
Previamente se habían producido otros cuatro fallecimientos por frío desde el inicio del invierno austral, el pasado 21 de junio.
Las anteriores víctimas fueron indigentes de la capital uruguaya, razón por la cual las autoridades pusieron en marcha una serie de medidas para evitar nuevos decesos, entre ellas la aprobación de una ley en el Senado para permitir el traslado forzoso a un refugio de personas sin techo en caso de que peligre su vida.
La ley, que debe ser refrendada por la Cámara de Diputados para entrar en vigor, establece que un médico tendrá que acreditar por escrito la existencia de dichos riesgos y que el traslado no implicará en ningún caso “la privación correccional” de la libertad de los indigentes.
Esta medida se estudia después de que la muerte de los indigentes en Montevideo causara críticas de la oposición, que acusan de negligencia al Ministerio de Desarrollo Social (Mides).
De otra parte, la masa de aire polar que desde hace días afecta a Brasil ha dejado temperaturas con valores negativos en una decena de ciudades del sur y sureste del país, que hoy amanecieron de nuevo cubiertas de hielo por el intenso frío.
El municipio de Bom Jesus, en el meridional estado de Río Grande do Sul, amaneció este miércoles con una temperatura de 3,8 grados bajo cero, similar a la que se pronostica para esta noche para la localidad de Urupema, en el estado de Santa Catarina, según datos del Instituto Nacional de Meteorología (Inmet).
Al menos tres personas murieron la semana pasada en el estado de Paraná por las heladas, que también han causado millonarias pérdidas por la destrucción de cultivos, según dijeron hoy las autoridades regionales.
La ola de frío ha llegado hasta Río de Janeiro, donde este martes se vivió la tarde más fría del año, con una temperatura mínima de 12 grados en una ciudad que presenta normalmente temperaturas superiores a los 30 grados. Según los meteorólogos, esta situación se prolongará al menos hasta el próximo sábado.
En Chile, la ola de frío afectó al centro del país, donde se registraron hasta 8,5 grados bajo cero, e incluso el extremo norte, más cálido, está sufriendo bajas temperaturas y un temporal de viento, lluvia y nieve que ha dejado más de 5.000 damnificados. Según los informes meteorológicos, el mal tiempo se prolongará al menos hasta el próximo viernes en las regiones de Arica-Parinacota, Tarapacá, Antofagasta y Atacama, que cubren un tramo de unos 1.200 kilómetros del territorio chileno. Sin embargo, Cristóbal Torres, meteorólogo de la Dirección de Meteorología de Chile, dijo hoy a Efe que “la onda polar ya pasó y ahora se están dando las condiciones propias del invierno (austral)”.
Bolivia, por su parte, informó de que por culpa de la ola de frío el número de personas afectadas por infecciones respiratorias subió a 50.000 en la última semana en la zona andina. Ante esto, las autoridades anunciaron hoy la ampliación de la vacación escolar de invierno por una semana para evitar contagios.
Por último, en el usualmente cálido Paraguay el descenso de las temperaturas, que llegaron a bajo cero en algunas regiones y con escarchas en las áreas rurales, se mantendrá en las próximas semanas, según el servicio meteorológico nacional.
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