Mañana toma el relevo la borrasca «Ruth» y el mal tiempo seguirá al menos 10 días más.
Aún no se ha ido Petra, y ya llega Qumaira
-estaba previsto que entrase de madrugada y alcanzará rachas de hasta
130 kilómetros por hora-. Mañana vendrá Ruth. El tren de borrascas
explosivas que se forman en el Atlántico por el choque del aire frío y
el cálido seguirá muy presente en Galicia al menos durante los próximos
diez días. Así lo confirman tanto desde la Agencia Estatal de
Meteorología como desde MeteoGalicia. De esta forma, la comunidad
encadenaría dos meses de tiempo explosivo.
Sin que la costa se haya podido recuperar de los
importantes destrozos que causó Nadja el pasado fin de semana, ayer las
olas volvían a alcanzar alturas impresionantes, de 12,54 metros en la
boya de Estaca de Bares (Mañón) y de 11,02 en cabo Silleiro
(Pontevedra). Así, el paseo marítimo de A Coruña amaneció con 20 metros
de la balaustrada rota, frente al hotel Riazor. Era la única parte que
quedaba en pie en esa zona después del temporal del fin de semana. Antes
de las siete de la mañana de ayer se prohibió la circulación de
vehículos en la fachada marítima ante la previsión de que el oleaje
pudiera inundar la calzada, como luego pasó.
Olas de cuatro metros y vientos de 40 nudos (más
de 70 kilómetros por hora) frustraron ayer el intento de recuperar el
control del buque Esnaab 715, que se vio en apuros el martes pasado y
sus cinco tripulantes tuvieron que ser evacuados en helicóptero a
Celeiro. La embarcación, de apoyo a instalaciones offshore, vacía y a
merced del oleaje, se encontraba ayer a 38 millas al nornoroeste del
cabo Ortegal. La operación de rescate está resultando compleja, según
Salvamento Marítimo. El mal tiempo no amaina y, por encima, que no haya
personal a bordo para apoyar las operaciones de enganche dificulta aún
más tomar el control del buque. Lo intentaron ayer los técnicos en
operaciones especiales de la base de Fene, que despegaron de la base de A
Coruña a bordo del Helimer 209, para descender desde el helicóptero y
poder realizar el remolque con el Sar Gavia, que vigila atentamente la
deriva de la embarcación. Los especialistas solo pudieron ojear, pues
las condiciones meteorológicas no dieron clemencia. Volverán a
intentarlo hoy.
Viento y lluvia hoy
Los efectos de Qumaira, al igual que Petra, se
notarán especialmente en tierra, con vientos superiores a los 100
kilómetros por hora -alerta naranja-, acumulaciones de lluvias de más de
40 litros por metro cuadrado -amarilla-, acumulaciones de nieve en las
montañas de Lugo y Ourense -amarilla- y olas de entre 5 y 7 metros
-naranja-. Ante estas condiciones, la Xunta ha decidido suspender de
nuevo hoy las actividades extraescolares al aire libre. Por su parte,
los ayuntamientos de A Coruña y Lugo cerrarán parques y jardines.
Un esquema de alertas muy parecido se repetirá
mañana, viernes, por la tarde-noche, aunque en este caso el temporal no
será culpa de Qumaira, sino de Ruth. Así seguirá el tiempo al menos
durante 10 días. «Esto no termina aquí, seguiremos con estos episodios
extremos muy seguidos. Está siendo absolutamente anómalo», señala Juan
Taboada, de MeteoGalicia.