Los 400 profesionales y 29 aéreos que combaten el incendio en la Serra de Tramuntana de Mallorca
intentan estabilizar el frente de Galatzó, donde existe una reserva
natural. Se prevé conseguirlo a lo largo del día después de que el resto
de flancos del fuego hayan sido "más o menos" estabilizados.
El jefe de Emergencias del Govern balear, Miguel Ángel Andreu,
ha informado en una rueda de prensa tras la última reunión de
coordinación del operativo de que hoy se ha sumado un nuevo helicóptero
al operativo de extinción del fuego, que ya ha arrasado 1.800 hectáreas
de esta sierra declarada Patrimonio de Humanidad. El trabajo de
descargas en la zona de la finca de Galatzó es bastante intenso, ha
resaltado Andreu, que ha señalado que a lo largo de la jornada de hoy se
está atacando este frente, el único que aún no ha conseguido ser
estabilizado.
"Está más o menos contenido; queremos acabar de atacarlo, definirlo y cerrarlo para que no pueda profundizarse en la zona;
la expectativa no es mala, pero tampoco hay que bajar los brazos porque
todavía el frente está abierto", ha advertido el jefe de Emergencias,
que ha recordado que se trata de "una zona muy dificultosa" ya que no se
puede acceder por tierra.
Durante la noche el viento ha cambiado de dirección y ha complicado el trabajo en Galatzó, donde había un dispositivo para desalojar a los animales de la reserva natural, pero no ha sido necesario porque el fuego no ha llegado hasta esta zona, ha destacado Andreu.
La previsión del tiempo indica que el viento aún sopla, lo que
impulsa la boca de fuego hacia el interior de Galatzó y "las previsiones
tienen que ser comedidas". "Tenemos las esperanzas y medios aéreos
potentes para que podamos tener más o menos estabilizado el frente a lo
largo de hoy", ha dicho Andreu.
El incendio forestal declarado el
viernes en el extremo oeste de la Sierra de Tramuntana ha obligado al
desalojo de 730 personas de las zonas afectadas. Andreu ha añadido que
se trabaja para que los vecinos evacuados de la población de Estellencs
puedan volver a sus casas hoy, aunque "no se permitirá la entrada a
ningún ciudadano a su vivienda hasta que tengamos la certeza absoluta de
que es una zona segura", ha afirmado.
El jefe de Emergencias del
Govern se ha mostrado convencido de que los medios aéreos y terrestres
que actúan en el combate del incendio "son más que suficientes"
El dispositivo que ha estado trabajando esta noche ha estado compuesto por 250 personas
del 061, Cruz Roja, Protección Civil (agrupaciones de Lloseta,
Puigpunyent y Calvià), Bomberos del Consejo de Mallorca, Bomberos de
Palma, Ibanat, Unidad Militar de Emergencias y técnicos de Emergencias.
Las tareas se han centrado en evitar que el fuego avanzara hacia el
Galatzó, a pesar de todos los esfuerzos han sido infructuosos. Además,
otros flancos han avanzado desde la carretera de Andratx a Estellencs
hacia el mar, acantilado abajo. Para una posible evacuación de los
animales de la Reserva Natural del Galatzó, se había previsto un
dispositivo que finalmente no se ha activado.
Por otra parte, las personas desalojadas de Estellencs
que no tenían medios propios para pasar la noche se han reubicado de la
siguiente manera, por parte de la Cruz Roja Baleares: 22 han dormido en
el Hospital de la Cruz Roja, 28 en la residencia de la UIB y 15 en una
finca próxima a Sa Granja de Esporles. De hecho, Cruz Roja Baleares
abandonó anoche el Polideportivo de Andratx para trasladar el albergue
de evacuados a la finca próxima a Sa Granja, donde se concentrarán todos
los evacuados esta mañana.
El incendio forestal que desde el pasado viernes ha quemado unas 1.800 hectáreas en el extremo oeste de la Sierra de Tramuntana de Mallorca
continúa sin control, tras obligar al desalojo de 730 personas que
pasaron esta noche fuera de sus casas. La zona afectada, poblada
principalmente de pinos, encinas y monte bajo, es el extremo occidental
de la Sierra de Tramuntana, declarada Patrimonio de la Humanidad por la
Unesco por sus valores medioambientales y etnográficos.