El número total de muertos por el corrimiento de tierras ocurrido en el sur de China el miércoles ha ascendido a 43, después de que las autoridades recuperaran 25 cuerpos más este fin de semana.
El desprendimiento fue, al parecer, causa de las fuertes
lluvias que azotaron la región desde el lunes y se registró a las 10.30
de la mañana del miércoles (2.30 GMT) en la localidad de Zhongxing, en
el término municipal de Dujiangyan, en la provincia sureña de Sichuan,
una de las ciudades más afectada por el terrible terremoto de Wenchuan
donde en mayo de 2008 fallecieron 90.000 personas.
Según publica la prensa oficial, los equipos de rescate consiguieron recuperar 25 cuerpos más durante el sábado, de los que diez han sido identificados.
En una rueda de prensa en la ciudad del suceso, el vicealcalde Chen Yangjie señaló que aún unas 118 personas siguen desaparecidas o no pueden ser directamente contactadas. Muchas de ellas son turistas, enfatizó Chen.
Los equipos de emergencia aún continúan trabajando en la
zona, si bien «no han detectado ningún signo de vida» en estos días,
según afirmó el jefe de la división de bomberos de Chengdu, capital de
la provincia de Sichuan, Ma Kun.
El corrimiento de tierras enterró once viviendas tras las fuertes tormentas
registradas en la región desde el lunes, las más severas que vive el
municipio desde 1954, según recoge el diario oficial «China Daily».
Antes de que ocurriera el suceso, 26.954 personas fueron realojadas.
El área afectada por el deslizamiento es de dos kilómetros y
los primeros cálculos de las autoridades indican un desplome de cerca
de 1,5 millones de metros cúbicos de lodo, rocas y escombros que enterró
11 viviendas.
El temporal, no sólo en la provincia de Sichuan, sino también en la de Yunnan (sur) y Henan (centro), provocó la muerte de al menos 30 personas esta semana, mientras que alrededor de 160 de ciudadanos siguen desaparecidos, según datos de las tres regiones.
De acuerdo con las autoridades, las lluvias torrenciales,
acompañadas en ocasiones de granizo, ocasionaron graves inundaciones y
corrimientos de tierras que afectaron a 1,67 millones de personas.
El centro y sur de China sufre cada año, especialmente en
los meses de verano, inundaciones y desastres naturales relacionados,
que en 2010 causaron un récord de 4.000 muertos, la cifra más alta en
una década.
