Un total de 67 fallecidos en el tren
accidentado en Santiago de Compostela han sido identificados y se les ha
practicado la autopsia este jueves, según los últimos datos
actualizados del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). Otros
13 cadáveres no han podido ser identificados y quedan pendientes de
nuevas pruebas que se practicarán este viernes.
Así, se examinarán los cuerpos para comprobar si tienen alguna
característica física que permita una identificación inequívoca, como
prótesis o tatuajes. En caso contrario, se hará una prueba de ADN. Para
ello, desde primera hora del día se han tomado muestras de ADN a los
familiares por si fuesen necesarias.
Fuentes del TSXG han explicado a los medios congregados ante el
Multiusos Fontes do Sar, que se ha habilitado como tanatorio, que dos
grupos especiales trabajarán en las pruebas de ADN con el fin de que los
resultados estén disponible "en dos o tres días".
Al pabellón continúan llegando los familiares de los fallecidos
que ya han sido identificados. De hecho, 26 familias ya han podido
recuperar los cadáveres. No obstante, no todos los cuerpos han sido
trasladados del tanatorio, puesto que no todas las familias han decidido
el proceso y en algunos casos, las funerarias no se han podido hacer
cargo aún de los cuerpos dado que las víctimas procedían de diferentes
lugares, algunos alejados.
Por el Multiusos han pasado a lo largo del día diferentes
representantes públicos, como el director general de la Policía, Ignacio
Cosidó; el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de
Mesa; el portavoz de AGE, Xosé Manuel Beiras; y el vicepresidente de la
Xunta, Alfonso Rueda.