Científicos norteamericanos monitorearon este fin de semana una nueva actividad del volcán Kilauea, uno de los cinco que conforman la isla grande de Hawai, después que a través de una fisura expulsara lava a 20 metros de altura.
Si bien no hay reportes de amenazas para los residentes vacinos de la zona, las autoridades llamaron a los turistas que se encuentran cerca a tomar resguardos.
El Kilahuea ha estado en una constante actividad por 28 años, pero según el geólogo Janet Babb, este fin de semana hay indicios de nuevos y más seguidos episodios eruptivos.
El sábado una de las laderas del cráter colapsó y el evento estuvo acompañado de 150 pequeños temblores en el área circundante al volcán. En el lado este se abrió la fisura que disparó lava a unos 20 metros.
Las autoridades cerraron el paso a vehículos en la zona, los sitios de camping en el parque nacional y los turistas sólo pudieron aperciar la erupción a unos 2,4 kilómetros de distancia.
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