jueves, 9 de diciembre de 2010

EL DESEMBALSE DEL GERGAL EXTIENDE EL RIESGO DE INUNDACIONES AL RESTO DE LA CUENCA DEL GUADALQUIVIR

*Después de Écija, ayer se anegó Lora del Río y ocho municipios estaban anoche en alerta. El PP criticó la gestión de la Agencia del Agua en el control de la cuenca.
El desembalse del Gergal acordado anoche de urgencia por la Agencia Andaluza del Agua mantuvo durante toda la noche en situación de alerta por riesgo de inundaciones a las localidades de La Algaba, Santiponce, Camas, Tomares, San Juan de Aznalfarache, Coria del Río, Puebla del Río y Aznalcázar. Las aguas desembalsadas a 800 metros cúbicos por segundo se unían al caudal de 3.000 metros cúbicos por segundo con el que bajaba el Guadalquivir, con el consiguiente riesgo de desborde en los municipios de la cuenca que activaron sus planes de prealerta, informaron fuentes de la Delegacíón del Gobierno en Andalucía.
En La Algaba y Camas, donde se puso en funcionamiento la estación de bombeo, se desalojaron las fincas habitadas con mayor riesgo de inundación, mientras que el plan de emergencia provincial activado durante el fin de semana solicitaba al Ayuntamiento de Sevilla la reubicación de los asentamientos chabolistas que existen en las zonas inundables del río a su paso por la capital.
La situación sigue siendo de emergencia a la espera de que la ausencia de lluvias evite hoy nuevas riadas como la que ayer obligó a desalojar a 150 familias de Lora del Río, o las que provocaron inundaciones en Guadalcanal y Tocina y el martes graves daños a un tercio del casco urbano de Écija.
La Junta mantuvo ayer activado el plan de Emergencia en nivel uno —de los cuatro existentes— en la provincia de Sevilla. Los datos facilitados por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir indican que el río bajaba a primera hora de la tarde de ayer con más de 2.000 metros cúbicos por segundo en el tramo de El Carpio y Fuente Palmera y que superó los 3.000 metros cúbicos por segundo en las cercanías de Sevilla, antes de desembalsar el Gergal. La Agencia Andaluza del Agua confirmó a ABC que el Iznájar no desembalsó ayer aunque sí lo hicieron las presas de Rumblar, Jándula y Guadalén.
El desembalse del Iznájar empezó unas jornadas antes del desbordamiento del Genil que anegó Écija justo en el día que se registraron más precipitaciones, el martes, lo que dio ayer pie a un enfrentamiento político. El presidente andaluz del PP, Javier Arenas, censuró la gestión de las cuencas realizada por la Agencia Andaluza del Agua, que antes correspondía a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y ante ello, el director gerente de la Agencia, Juan Paniagua, exigió ayer «respeto» hacia los técnicos de esta agencia que se encargan de llevar a cabo los desembalses. Paniagua aseguró que los alivios «no fue lo que causaron dicho desborde, sino las intensas lluvias que hicieron que el río llegara a alcanzar, en menos de 24 horas, los 1.130 metros cúbicos que se registraron este martes a las 6,30 horas». Lo cierto, es que este año las lluvias han cogido a los embalses andaluces al 75,6% de su capacidad, mientras que el año pasado estaban al 32,8%. En estos momentos los pantanos del Guadalquivir están al 84%.
Según los puntos de medición de la Agencia, a primeras horas de ayer sólo el de Peñaflor era considerado zona conflictiva, con 49,58 metros sobre el nivel del mar y 3.085 metros cúbicos por segundo, un volumen que fue determinante en las inundaciones de Lora donde hubo que desalojar a 150 familias en la barriada de La Petra, ya que se desbordó el arroyo Churre por la crecida del Guadalquivir. En Lora del Río estaban trabajando ayer 154 efectivos de Policía Local, Policía Nacional, Policía Adscrita a la Junta, bomberos,voluntarios de Protección Civil, efectivos del Plan Infoca y de la Unidad Militar de Emergencia. Metereología mantenía la «alerta naranja» por fuertes lluvias en la Sierra Norte hasta las tres hora de hoy y la ampliaba con nivel «amarillo» de menor intensidad en la Campiña.
EA2CPG