Los pueblos que jalonan el río Guadalquivir en Sevilla tenían activado desde la medianoche de ayer sus planes de emergencia porque el cauce comenzó a subir de nivel sin remedio y temían, especialmente Lora del Río, una nueva inundación, la tercera del mes, que terminó llegando.
El casco urbano de Lora del Río volvía a verse afectado por la crecida, en los mismos puntos que las dos veces anteriores, aunque con menos incidencia que el pasado día 7: Alameda del Río, León XIII, la avenida del Castillo y Virgen de Setefilla.En este último residencial, la desesperación se hacía patente. Como en el rostro de Joaquín Moreno: "La verdad es que ya estamos hartos, nos viene afectando en nuestra vida personal porque apenas si tenemos ilusión de nada, ya que en lo único que pensamos es que no llueva para no tener que achicar más agua".
Poco después activó su plan de emergencia Tocina debido al "alto riesgo" de inundaciones. El alcalde, Juan de Dios Muñoz (PSOE), se reunió para ello con los técnicos responsables de coordinar el operativo y dio aviso a los afectados en la anterior inundación para que desalojaran sus domicilios y pusieran en alto el mobiliario, además de ofrecerles todos los recursos materiales y humanos con los que cuenta el Ayuntamiento de Tocina.
Paralelamente, se estudiaban los datos que iban llegando desde Protección Civil, Policía Local, Delegación Provincial del Gobierno de la Junta de Andalucía y servicio de emergencias 112 por si fuera necesario adoptar otro tipo de medidas.
Brenes, Peñaflor y Alcolea del Río se encontraban en la misma situación, pendientes del río y cruzando los dedos.
Pero en la fértil comarca de la Vega no sólo se pierden enseres: el daño en los cultivos está siendo importante. Falta por valorar la afección sobre la naranja, en campaña de recolección. También la pérdida de los cultivos de caquis que iban a recogerse en unos días después de las fuertes lluvias. Todo está perdido. "Hay que comprobar todavía si además del fruto está afectado el árbol, porque replantar supondría una inversión mucho mayor y unos años sin recolección", apuntó en relación al caqui el alcalde de Tocina. Lora del Río vive de la fruta de hueso, por lo que la incidencia sobre el empleo en el municipio es "tremenda". Todo se irá evaluando en unos días.
EA2CPG