Las víctimas son dos hermanas, de 95 y 84 años, que se encontraban en la habitación donde se originó el fuego, en torno a las nueve de la mañana y por causas aún desconocidas
Las fallecidas residían junto al hijo de una de ellas, que había salido a tomar un café, y que está ingresado en Valdecilla tras inhalar humo cuando intentó rescatarlas
Dos niños de 3 y 11 años fueron trasladados a la Residencia pero ya han sido dados de alta
El suceso obligó a movilizar a 22 bomberos y a 12 agentes de la Policía Local.
María Ángeles y Carmen González Campillo, dos mujeres de 95 y 84 años, hermanas, han fallecido esta mañana en Santander al incendiarse su vivienda, situada en el bloque B-6 de la Colonia de los Pinares, en Santander.
El incendio se declaró sobre las 08.50 horas en el piso 3ºC del bloque, donde residían las fallecidas junto al hijo de una de ellas, de nombre Enrique. Tras la oportuna investigación, la brigada de la Policía Científica señaló esta tarde que se trata de un incendio "accidental y fortuito", aunque de momento no se puede precisar la causa exacta. Miembros de este cuerpo también han confirmado que no había nada encendido ni enchufado en el cuarto donde se originaron las llamas, ni estufas ni braseros ni otros aparatos eléctricos que pudieran ser causantes. La investigación sigue, por tanto, abierta, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 4 de Santander.
Además, dos niños ecuatorianos de 3 y 11 años que residían en el quinto piso del mismo bloque tuvieron que ser evacuados a la Residencia Cantabria con síntomas de haber inhalado humo. Según informan fuentes del centro, fueron dados de alta pasado el mediodía.
Hasta Valdecilla fue trasladado el adulto que vivía con las fallecidas, donde está siendo atendido de la fuerte inhalación de humo que ha sufrido al intentar rescatar a su madre y tía. Su estado no es grave, pero precisa de atención sanitaria durante todo el día. Se encuentra en una cámara hiperbárica hasta que se consiga reducir el alto grado de monóxido de carbono que presentan sus pulmones. Además, presenta un cuadro de shock nervioso.
El hombre había salido a tomarse su habitual café de cada mañana en el Manila y a su vuelta se encontró con su casa en llamas y trató de entrar para rescatar a su madre y a su tía. Enrique salió totalmente tiznado y en estado de 'shock'.
Una de las ancianas estaba muerta en la cama y la otra yacía en el suelo. El incendio se originó en la habitación donde se encontraban las señoras y no desplazó a otros puntos de la casa pero sí provocó una fuerte humareda, que afectó a las viviendas contiguas, que tuvieron que ser desalojadas.
Las dos hermanas, dependientes, tenían contratadas a dos cuidadoras, una que las atendía los fines de semana y otra en los días laborales. Una de ellas, que se mostraba totalmente desolada y cubierta de un manto de lágrimas cuando se desplazó hasta el lugar, explicaba que María Ángeles y Carmen habían intentado conseguir en varias ocasiones, y sin ningún éxito, un servicio de teleasistencia con alarma.
El levantamiento de los cadáveres se ha producido en torno a las doce de la mañana una vez realizadas las diligencias correspondientes.
Desalojo
El resto de vecinos del inmueble fueron desalojados por los bomberos -cinco personas que vivían en el quinto piso- o abandonaron el edificio por su propio pie y contemplaron con desolación desde el exterior los efectos del siniestro, llorando la muerte de sus vecinas, muy queridas en la zona, donde habitaban desde la creación de la Colonia de los Pinares, a principios de los años 60.
Los bomberos de Santander llegaron al lugar de los hechos a los cuatro minutos de recibirse el aviso, desalojaron el edificio y atajaron rápidamente el fuego, muy localizado en la vivienda siniestrada. Uno de ellos tuvo también que ser atendido allí mismo debido a la inhalación de humo, que le provocó un pequeño desvanecimiento.
Importante despliegue
El incendio ha obligado a movilizar 22 bomberos, a doce agentes de la Policía Local y al Servicio de Urgencias Sanitarias 061, en un operativo que ha supervisado en el mismo lugar de los hechos el alcalde de la ciudad, Íñigo de la Serna. Hasta la zona también se han trasladado varios concejales del equipo de gobierno, así como un equipo de psicólogos.
Las dos mujeres fallecidas eran madre y tía respectivamente del ex concejal socialista del Ayuntamiento de la capital, Luis Sainz, ingeniero de Caminos, que acudió a la zona, donde fue consolado por los miembros de la corporación.
EA2CPG