La Comisión Europea ha comprometido 2 millones de euros para ayuda humanitaria urgente a los miles de damnificados por las graves inundaciones que asolan Sri Lanka, sobre todo en el centro y este del país, y que ha dejado más de una veintena de muertos y 300.000 desplazados.
Desde el pasado 26 de diciembre las lluvias torrenciales azotan la isla, lo que ha provocado inundaciones y desprendimientos de tierra sobre todo en el este y en el centro. El distrito de Baticaloa (este) ha recibido la mayor cantidad de precipitaciones del último siglo.
Los fondos liberados por Bruselas serán gestionados por las organizaciones internacionales sobre el terreno y servirán para abastecer de agua y alimentos de emergencia a los afectados, así como para hacer llegar a la zona equipamiento sanitario y material de primera necesidad. La Comisión estima que tras las fuertes lluvias de los últimos días los afectados superan el millón de personas.
La comisaria de Ayuda Humanitaria, Cooperación Internacional y Respuesta a Crisis, Kristalina Georgieva, ha asegurado que el "deber" de la Unión Europea es asistir de urgencia a las víctimas y a la población "más vulnerable" que sufre los efectos de un temporal "dramático".
Más de 300.000 personas han sido desplazadas y alojadas en albergues temporales, pero Bruselas advierte de que la destrucción de importantes infraestructuras ha dejado muchas zonas inaccesibles.
En este sentido, la comisaria ha dejado claro que su principal preocupación se centra en hacer llegar "los medios de subsistencia para las víctimas" y alerta de la "repercusión humanitaria" de un clima "cada vez más caprichoso" que provoca catástrofes naturales y arruina las cosechas y los campos "por todo el mundo".
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