El primer ministro checo, Petr Necas, ha declarado el estado de emergencia en gran parte del país tras el desborde de los principales ríos debido a las fuertes lluvias que amenazan ya el centro histórico de Praga y ha obligado a evacuar varias zonas habitadas. "El Gobierno ha aprobado la declaración del estado de emergencia, que facilitará las medidas de rescate", ha explicado Necas tras una reunión de urgencia del Consejo de Ministros que ha aprobado destinar 300 millones de coronas (unos 11,6 millones de euros) a las labores de urgencia. Otros 1.300 millones de coronas se destinarán a la limpieza de los daños.
Además, Necas ha anunciado que 2.000 soldados se sumarán a los 300 que trabajan ya en las zonas afectadas por las inundaciones para construir diques provisionales y muros de sacos de arena.
En Praga el Ejército ha levantado diques de metal y ha apilado sacos de arena en las riveras del río Moldava para proteger el centro histórico de la capital ante el riesgo de desbordamiento.
Las autoridades han ordenado reducir el transporte público y han cerrado las el metro ante la subida del nivel del agua, que ha anegado ya partes del casco antiguo, declarado patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Las fuertes lluvias han dejado ya dos muertos en República Checa y uno en Austria. En Austria el fallecido es un trabajador de los equipos de limpieza que fue sepultado en un desprendimiento de tierra en la localidad de St Johann, cerca de Salzburgo, según ha informado la Agencia de Noticias Austriaca.