Pero el suceso con las consecuencias más trágicas se produjo en el concello coruñés de Mazaricos. Un vecino del lugar de Campelo murió cuando limpiaba una tajea para evitar que el agua, que ya había anegado la carretera, entrase en las viviendas. El cuerpo de la víctima, José A. G., de 60 años, fue encontrado hacia las 11.30 horas por una vecina de la localidad. El hombre llevaba ropa y calzado de aguas y tenía una azada, por lo que todo apunta que salió de su casa para limpiar de ramas y hojas la cuneta. Por causas que deberán determinarse en la autopsia, el hombre cayó de bruces sobre la tajea. No se descarta la hipótesis de que, al no poder incorporarse, muriera ahogado. Vecinos del lugar indicaron que, debido a la gran cantidad de lluvia caída, la cuneta rebosaba.
Caldas de Reis también estuvo en alerta ayer. Los
vecinos se levantaron con la vista puesta en el río Umia. Las intensas
precipitaciones caídas desde el jueves obligaron a abrir las compuertas y
los aliviaderos del embalse de A Baxe ante la crecida del río, que hizo
que el cauce se desbordara en varios puntos del casco urbano.
La complicada situación hizo que se desplazara
hasta la presa el presidente de Augas de Galicia, Francisco Menéndez, y
que acudiera a Caldas el grupo de apoyo logístico de la Axencia Galega
de Emerxencias (Axega). Según explicó el alcalde, Juan Manuel Rey,
pasadas las dos de la tarde el embalse estaba en la cota 120,5 (el
límite para desbordarse está en 121), aunque por la tarde descendía
cuatro centímetros cada media hora. «En el centro del pueblo el río
alcanzó los 3,70 metros y desborda completamente a los 4,10 metros, por
lo que hay que seguir la evolución y estar en alerta», señaló el
regidor. Para evitar complicaciones se cerró al tráfico la calle Carlos
García Bayón y Protección Civil y la Policía Local estuvieron
movilizados durante toda la noche por si era necesario intervenir.
Esta nueva inundación puso de manifesto que, aunque la presa ayuda a
regular el río, en situaciones extremas resulta insuficiente, dada su
capacidad (6,15 hectómetros cúbicos), para evitar anegamientos. Algo que
ya pasó en años anteriores y que no olvidan los vecinos y negocios más
afectados.
EA2CPG