La Policía ha indicado a Radio New Zealand que las tres muertes están relacionadas con la construcción de una escuela en el barrio de Hobsonville. Un portavoz del Cuerpo de Bomberos ha concretado a la agencia de noticias Reuters que dos de los fallecidos han sido aplastados por los materiales de la obra.
Además, varias personas han resultado heridas a causa de los materiales de construcción y de los árboles arrastrados por el viento, de las cuales siete han tenido que ser trasladadas a centros sanitarios de la ciudad.
Por su parte, el diario 'New Zealand Herald' añade que los servicios de emergencias están buscando en el edificio en construcción a los obreros, que al parecer también han quedado atrapados entre los escombros.
En estos momentos, el personal militar está recorriendo la zona, casa por casa, para averiguar si hay más personas heridas, atrapadas o desaparecidas a causa del temporal.
De forma preventiva, unas 250 personas han sido trasladadas a la base de la Fuerza Aérea del distrito de Whenuapai, donde se espera que pasen las próximas horas hasta que las lluvias torrenciales y las ráfagas de viento remitan.
Los distritos más afectados son los ubicados en la parte occidental de Auckland, sobre todo Hobsonville, Whenuapai, Greenhithe y Riverhead, donde más de 1.300 personas se han quedado sin suministro energético y cientos de casas están dañadas.
La red de transporte también se ha visto afectada. La autopista estatal 18, conocida como Upper Harbour, está bloqueada por los objetos arrastrados por el viento, por lo que las autoridades han ordenado su cierre temporal. También se han cancelado los vuelos con destino y origen en Auckland.
No obstante, las líneas de autobuses, de trenes y de ferry siguen operativas, aunque han sufrido cambios de horario.
La tormenta ha llegado a Auckland alrededor de las 1.00 horas del jueves (13.00 horas del miércoles en España) con vientos de más de 100 kilómetros por hora e intensas precipitaciones. Se espera que el temporal continúe durante el jueves.
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