Además, la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de
Heredia, ha convocado para hoy viernes al Consejo Asesor (Mesa de
Crisis) de los tres territorios con el fin de analizar la situación y
tomar las medidas preventivas oportunas de cara al fin de semana.
Según Euskalmet, dicha situación obedece a la llegada de
diferentes borrascas y frentes asociados de oeste a este que afectarán
de lleno a Euskadi, provocando abundante precipitación, fuertes vientos y
grandes oscilaciones en las temperaturas. La cota de nieve podría
situarse por debajo de los 1.000 metros en el transcurso de algunos
periodos.
En Gipuzkoa,
ayer, la salida de su cauce del Urumea, en Astigarraga, ha inundado la
zona en la que está instalado un campamento rumano, cuyos moradores ya
fueron desalojados el pasado martes y trasladados al polideportivo de la
localidad, aunque algunos ya han regresado a sus chabolas.
A las 7.00 horas de ayer Añarbe abrió sus compuertas para
tratar de aliviar parte del agua retenida durante las últimas horas. Se
prevé que las maniobras se repitan durante toda la jornada, para vaciar
en lo posible la presa, a la espera de las lluvias previstas para el
fin de semana.
Desprendimiento sin consecuencias en Eibar
Las lluvias caídas en los últimos días hicieron que el terreno haya cedido en la parte trasera de los números 17, 19 y 21 de la calle Ubitxa de Eibar, según informa Félix Morquecho. El desprendimiento se produjo durante la noche pero muchos vecinos no se enteraron hasta la mañana. Los vecinos recordaban las obras realizadas tras un desprendimiento en 1992, en las cuales se construyó un muro de contención. Ahora, serán necesarios entre 25 y 30 cargas de camión para retirar toda la tierra y piedras caídas. El Ayuntamiento estudiará la necesidad de tomar medidas de afianzamiento del terreno y la posible retirada de árboles que podrían crear riestos en esta zona.
Las lluvias caídas en los últimos días hicieron que el terreno haya cedido en la parte trasera de los números 17, 19 y 21 de la calle Ubitxa de Eibar, según informa Félix Morquecho. El desprendimiento se produjo durante la noche pero muchos vecinos no se enteraron hasta la mañana. Los vecinos recordaban las obras realizadas tras un desprendimiento en 1992, en las cuales se construyó un muro de contención. Ahora, serán necesarios entre 25 y 30 cargas de camión para retirar toda la tierra y piedras caídas. El Ayuntamiento estudiará la necesidad de tomar medidas de afianzamiento del terreno y la posible retirada de árboles que podrían crear riestos en esta zona.
Las fuertes precipitaciones también han provocado corrimientos de tierras en diferentes puntos, el más importante en Zalla,
que afectó anoche a una canalización del gas, lo que originó una
pequeña explosión sin que se registraran heridos, ha informado la
Ertzaintza.
Durante la jornada de ayer, en Gipuzkoa, también se
produjeron diferentes desprendimientos de tierra, uno de los cuales
sepultó parcialmente de madrugada una casa en Azpeitia, mientras que por
la tarde seis personas fueron desalojadas de un bloque de viviendas en
Alegia a causa de la caída de tierra del monte situado en la parte
trasera del inmueble.
El foco de atención se centraba entonces en los
desprendimientos de tierra. La madrugada del miércoles un
desprendimiento provocado por las lluvias sepultaba parcialmente una
casa unifamiliar en el barrio de Urrestila de Azpeitia.
Sus seis habitantes lograban salir de su vivienda antes de que
sucediera el desprendimiento y todavía permanecen alojados en casa de un
familiar.
Por otra parte el barrio de Behobia de Irun
registraba la caída de un muro y como consecuencia del mismo se
mantiene cortad el acceso al polígono de transportes Zaisa III. Además
hubo que desalojar dos viviendas de la parte superior de una ladera, en
cuyas terrazas aparecieron grietas.
Derrumbe en Iterlimen
Derrumbe en Iterlimen
Por otra parte un vehículo resultaba dañado tras un
derrumbe de tierra en Iterlimen. El corrimiento de tierra se producía al
final del primer bloque de viviendas y únicamente afectaba a ese
vehículo, sin que hubiera que lamentar más daños materiales o
personales. Por la tarde seguían los trabajos de limpieza de la zona.
También permanecen en el polideportivo de Astigarraga los ciudadanos rumanos de los dos campamentos instalados en ese municipio.
El alcalde, Andoni Gartzia, explibaba ayer que los de las
chabolas que han quedado afectadas tendrán que ser realojados -el
Ayuntamiento estudia dónde con la Diputación- y el resto volverá a los
campamentos.
«El realojo a Morlans va muy despacio»
El martes el río Urumea desbordaba en algunos puntos y el Ayuntamiento de San Sebastián recomendaba a los vecinos de Txomin y Martutene que
movieran sus vehículos a zonas altas. Los vecinos manifestaban ayer su
hartazgo por la situación que se repite cada vez que las lluvias son
intensas y esperan que el realojo a Morlans se realice cuanto antes.
El alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre,
informaba ayer de la bajada del nivel del Urumea mientras que la edil de
Infraestructuras y Servicios Urbanos, Nora Galparsoro, informaba sobre
los litros de agua caídos que eran hasta ayer al mediodía 160 litros de
agua por metro cuadrado y se esperan 20 litros hasta las seis de la
tarde, 20 hasta medianoche y el resto a partir de la madrugada.
Según informa Txema Vallés en Lasarte-Oria
las instituciones continuaba ayer en alerta por si volvieran, de nuevo,
las aguas crecidas en el río Oria y regatas que concluyen su camino en
el mismo, caso de las de Loidi, Oztaran y Buruntza en Oria. Si el martes
por la tarde-noche, llegó el cauce del río Oria -a la altura del puente
del Hipódromo-, a superar casi los 5 metros, sin lograr superar los
muros del encauzado río; poco a poco, su nivel fue bajando hasta llegar a
casi su normalidad. Ayer por la mañana sus aguas transitaban por la
localidad a gran velocidad, pero no llegaban a los 3 metros.
Previsión
Seguridad ha informado de que, según Euskalmet, para hoy
no se esperan lluvias, a excepción del oeste de Álava y Bizkaia, donde
pueden registrarse precipitaciones débiles durante la madrugada.
Los problemas, sin embargo, podrían aparecer en algunos puntos del este de Álava y Gipuzkoa, donde podrían producirse placas de hielo.
En principio, mañana viernes, vendrán varios frentes
cálidos que dejarán precipitaciones abundantes y persistentes con
temperaturas relativamente suaves. La cota de nieve se situará por
encima de los 1.500 metros.
Sin embargo, el sábado 19, se acercará una profunda
borrasca que se irá desplazando de oeste a este a través de la Península
Ibérica. Esta dejará vientos del sur moderados por la mañana con rachas
en zonas expuestas en torno a 70-80 km/h, girando bruscamente en torno
al mediodía a componente norte e intensificándose con rachas que podrían
superar los 100 km/h en zonas expuestas.
El episodio también dejará precipitaciones que serán más
abundantes y de cierta intensidad durante la segunda mitad del día. Las
temperaturas descenderán de forma brusca y notable a partir del mediodía
cuando se produzca el giro de viento, por lo que la cota de nieve
descenderá rápidamente desde los 2.000 metros hasta los 1.000 metros por
la tarde, pudiéndose alcanzar hasta incluso los 800 metros al final de
la jornada.
Durante el domingo 20 continuarán las precipitaciones,
especialmente durante la primera mitad del día y las temperaturas bajas,
mientras que la cota de nieve podría descender hasta los 600 metros
durante la madrugada subiendo por la tarde en torno a los 1000 metros. A
lo largo de la jornada predominarán los vientos del noroeste moderados
durante la primera mitad del día y los del oeste-suroeste moderados
durante la segunda mitad del día.
En cuanto a la próxima semana, los pronósticos indican
que podría seguir con la misma tónica, afectados por diferentes
borrascas y frentes acompañados de precipitaciones, sin descartar alguna
jornada en la que las cotas de nieve sean relativamente bajas.
EA2CPG