La nieve caída en los últimos días en Cantabria mantiene cerrados al tráfico dos puertos de montaña en la red autonómica de carreteras, y el viento, que sopla hoy en la región con rachas por encima de los 80 kilómetros por hora, complica la circulación en las autovías del Cantábrico y la Meseta.
De hecjo, ésta madrugada se han registrado rachas de viento de 107 kilómetros en Tresviso y de 100 kilómetros en Santander, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemte) consultados por Europa Press. Son las rachas más significativas que se han producido en Cantabria , que está este jueves en alerta amarilla por viento.
Las rachas alcanzaron los 90 kilómetros por hora en San Vicente de la Barquera, los 86 en Sierrapando (Torrelavega) y los 82 en el aeropuerto de Santander. No se ha producido ningún tipo de retraso o cancelación de vuelos motivado por el viento en Parayas,.
Según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), a primera hora de la mañana continuaba cerrado el puerto de Lunada, en la carretera CA-643, en un tramo de seis kilómetros a la altura de la localidad de La Concha.
También en Estacas de Trueba (CA-631) sigue cortado al tráfico otro tramo de unos seis kilómetros en la zona de Vega de Pas.
Además, la nieve obliga a utilizar cadenas o neumáticos de invierno en otros dos puertos de montaña de la red autonómica, en los que se ha prohibido el paso de autobuses, camiones y vehículos articulados.
Se trata de Palombera, en la CA-280, con un tramo de doce kilómetros afectado en la zona de La Lomba, y de La Sía (CA-665), en un tramo de algo más de ocho kilómetros en el área de Asón.
A las incidencias por la nieve se suman también hoy algunas complicaciones por el viento, que afecta a la circulación en 30 kilómetros de la Autovía del Cantábrico (A-8), entre Mioño y Colindres, y a siete kilómetros de la Autovía de la Meseta (A-67), entre Gornazo y Mompía.
El Servicios de Emergencias del Gobierno regional ha recibido durante la noche 121 llamadas, de las que 57 generaron algún tipo de incidencia, seis de ellas "adversas" por problemas provocados por el viento.
Según informan en una nota de prensa, durante la noche ha caido un árbol en la calzada en la CA-147 en Beranga y en la CA-263 en Vega de Pas. Además, el viento ha tirado un poste de hormigón en Igollo.
En Los Corrales de Buelna se han vuelto a inundar unos garajes en el Barrio de Santiago.
Alertas
En la costa sigue activada la alerta naranja. Y es que el mar de fondo del Noroeste va a chocar contra los acantilados de la región con olas de entre 4 y 5 metros. Ayer, que también se esperaba ese mismo mar de fondo, las olas llegaron a superar los 9,5 metros de altura durante la madrugada, y los 8,20 metros a lo largo de la tarde. Así lo registró la boya de la Red Vigía situada frente a la costa de Santander. Mar adentro, la boya AGL medía olas máximas de hasta 7,30 metros de altura.
De lo que sí se levantan las alertas en Cantabria es por el riesgo de nevadas. Según Aemet la cota se sitúa hoy en torno a los 800 metros y las precipitaciones, ya de menor entidad respecto a estas pasadas jornadas, se centrarán principalmente en el litoral. Ayer los mayores problemas se dieron en zonas de montaña y por nieve, que obligó a mantener cerrados los puertos de Lunada, La Sía y Estacas de Trueba; durante el día fue necesario usar cadenas para transitar por los de Brañavieja y Palombera.
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