El terremoto se produjo a 40 kilómetros al norte de Bolonia y a 60 kilómetros al este de Parma y el hipocentro se ha localizado a 9,6 kilómetros de profundidad, según el Observatorio Geológico de Estados Unidos (USGS).
El pasado 20 de mayo se produjo otro terremoto con epicentro en la zona de Ferrara, en el centro-norte de Italia, que destruyó edificios en las ciudades de Modena, Ferrara, Mantua y Bolonia. Al menos siete personas murieron y cientos se vieron obligadas a huir de sus casas.
Anteriormente, medios locales dijeron que el seísmo, que se sintió hacia las 7 de la mañana sobre todo cerca de la ciudad de Módena, había causado un muerto y varios heridos.
"Hay víctimas (..) la situación es muy grave, algunas personas quedaron atrapadas bajo los escombros", dijo Alberto Silvestri, alcalde de San Felice sul Panaro, a la cadena de televisión SkyTG24.
Las autoridades no han dado aún una confirmación oficial del número de víctimas
El seísmo se produce apenas una semana después de que otro temblor sacudiera la región, matando a siete personas y destruyendo o dañando cientos de edificios.
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