Cuatro personas, entre ellas un niño de un año, perdieron la vida tras un alud en Calarcá (Quindío).
Dos viviendas quedaron sepultadas tras la emergencia (la más grave reportada este sánado en la región). Hasta el momento se reportan ocho personas heridas.Por otra parte, un deslizamiento en el barrio Cervantes, cerca del centro de Manizales (calle 26 con carrera 32) deja dos personas muertas y cinco heridas. Se estima que el alud afectó a diez viviendas.
A esta hora bomberos y socorristas buscan entre los escombros a posibles víctimas de la tragedia, que ocurrió en horas de la madrugada. Dos personas han sido rescatadas y remitidas al Hospital de Caldas.
El deslizamiento fue consecuencia de un fuerte aguacero que comenzó a las 9 de la noche del viernes y se prolongó durante una hora. La lluvia estuvo acompañada por una tormenta eléctrica que provocó apagones intermitentes en toda la ciudad.
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