Con la nieve mostrando por primera vez este año su fiereza en la provincia y los ríos a rebosar, el temor a que vuelvan a producirse inundaciones se intensificó ayer en las localidades de la cuenca del Zadorra. El invierno, marcado por las intensas y constantes lluvias, ha sido muy complicado en el territorio y los daños en cosechas y todo tipo de infraestructuras, incontables. Ahora, el riesgo de que toda la nieve caída ayer se funda rápidamente y provoque inundaciones se une al alto nivel de ocupación de los embalses. Ullibarri, por ejemplo, se encontraba ayer al 90%. Estos miedos también han llegado a las instituciones vascas y alavesas, que trabajan coordinadamente en la Mesa de Seguimiento del Sistema del Zadorra, pese a que ayer quisieran mandar constantes mensajes de tranquilidad.
El desembalse de Ullibarri se incrementó al filo de las 15.00 horas hasta los 70 metros cúbicos por segundo y mantuvo este importante nivel, el más alto de los últimos días, hasta bien entrada la tarde. Pocos minutos antes del cierre de esta edición, no obstante, fuentes de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) confirmaron a este periódico que la evacuación de agua se reduciría drásticamente a últimas horas del día, incluso a niveles cercanos a los 30 metros cúbicos por segundo. La operación se llevó a cabo cuando las entradas al embalse lo permitieron.
Es la propia Mesa de Crisis -integrada por la Agencia Vasca del Agua, Diputación alavesa, Ayuntamiento de Gasteiz, Amvisa o Emergencias del Gobierno Vasco, entre otros organismos- la que solicita a la CHE el nivel de desembalse más adecuado para que el agua no anegue el Zadorra y, por ende, ponga en riesgo a las localidades que beben de él. La última reunión de este organismo interinstitucional tuvo lugar a media tarde, alrededor de las 18.00 horas, cuando la situación ya casi se había normalizado. Antes, la Consejera vasca de Seguridad del Gobierno, Estefanía Beltrán de Heredia, decidió mantener activado el nivel 1 del Plan Especial de Emergencia ante riesgo de inundaciones.
"contener el agua" Con todo, ya a media tarde, el diputado general de Álava, Javier de Andrés, había solicitado a la CHE la reducción del nivel de desembalse hasta los 45 metros cúbicos, con el doble objetivo de evitar inundaciones y "contener" el agua de la nieve. De Andrés celebró también la "buena colaboración" entre Gobierno vasco, Diputación y Ayuntamientos a la hora de gestionar las incidencias derivadas del temporal y justificó también que las predicciones no habían informado "con claridad" cuáles iban a ser las consecuencias exactas del temporal.
En esa misma línea se expresó también el alcalde Gasteiz, Javier Maroto, para quien la prioridad ahora pasa por "combinar la seguridad de Ullibarri" y que el desembalse provoque los menores daños posibles dada la "situación compleja" que se espera en las próximas horas.
