Estados Unidos seguirá cubierto de blanco. Luego de ser azotado por una
tormenta que dejó acumulaciones récords de nieve durante el fin de
semana, el país norteamericano se prepara para enfrentar otro fenómeno
similar. El presidente Barack Obama, declaró estado de emergencia en
Connecticut.
El Servicio Nacional de Meteorología de ese país,
informó de la llegada de otra tormenta que dejará a su paso fuertes
nevadas y vientos en los estados del Medio Oeste, mientras “Nemo” se
desplazó al océano Atlántico.
“Una gran tormenta de invierno
traerá fuertes nevadas y vientos fuertes del Noreste de Colorado en el
Centro de Minesota del domingo al lunes”.
Se esperan, además,
“grandes cantidades de nieve” en áreas del Este de Dakota del Sur donde
podrían acumularse 30 centímetros de nieve.
“Nemo” azotó durante
el fin de semana a los estados de Connecticut, Rhode Island,
Massachusetts, Vermont, New Hampshire, Maine y Nueva York. Al menos 10
personas murieron en Estados Unidos y tres más en Canadá.
Los
trabajadores municipales desde Nueva York hasta Boston trabajaron desde
la noche del sábado al domingo en comunidades cubiertas de nieve, donde
algunos automovilistas debieron ser rescatados después de pasar horas
atascados en la oscuridad.
Las cuadrillas de emergencia y los
residentes colaboraron en el despeje de carreteras y aceras. La
precipitación arrojó hasta casi un metro de nieve y desató ráfagas de
viento que dejaron sin electricidad a 660 mil usuarios.
En
Portland (Maine) los 81 centímetros de nieve alcanzados rompieron el
récord establecido en 1979, mientras que los 80 centímetros acumulados
en algunas localidades del condado de Suffolk, en Long Island (Nueva
York), también marcaron un récord.
Las autoridades han destacado que, a pesar del metro de nieve acumulado
en algunas zonas de New England, el impacto de “Nemo” ha sido menor al
coincidir con el fin de semana.
En tanto, el presidente de
Estados Unidos, Barack Obama, declaró estado de emergencia para
Connecticut, uno de los lugares más afectados por la tormenta, lo que
facilitará el acceso a recursos federales para las labores de limpieza y
recuperación de las zonas perjudicadas.
Obama ha ordenado
movilizar ayuda federal para complementar la ayuda estatal y local para
responder a los esfuerzos destinados al restablecimiento de la
normalidad tras la tormenta, informó la Casa Blanca en un comunicado.
La
acción del presidente autoriza al Departamento de Seguridad Nacional
(DHS) y a la agencia de gestión de emergencias (FEMA) a coordinar las
labores para identificar, movilizar y proporcionar el equipo y los
recursos necesarios para aliviar el impacto de la tormenta durante un
periodo de 48 horas.
Por otra parte, poco a poco los aeropuertos
han reabierto al tráfico aéreo y de los más de cinco mil vuelos
cancelados durante el fin de semana, según el rastreador de vuelos
Flightstats, ayer domingo había 453 vuelos cancelados y mil 444
retrasados.