Una borrasca muy intensa podría dejar esta madrugada fuertes vientos y lluvias, sobre todo en la costa
A primera hora de la tarde de ayer, los modelos de
predicción aún no lo tenían claro. «Algunos dan una borrasca para el
sábado [mañana], otros no. Podría ser finalmente una situación normal de
invierno de mal tiempo», apuntaban desde MeteoGalicia. Tampoco tenían
la certeza de que la baja fuera a profundizarse tanto y tan rápido como
para convertirse en una ciclogénesis explosiva y afectar a Galicia. Pero
dos horas después, el pronóstico cambiaba: «La borrasca se profundiza
mucho, puede ser importante, muy intensa». Es lo que tienen este tipo de
bombas meteorológicas, que no son fáciles de predecir.
Lo que sí se sabe es que de formarse una
ciclogénesis explosiva -lo que significa que la presión en su centro
descendería más de 20 milibares en solo 24 horas- «se desarrollaría
rápido y pasaría rápido también». Es decir, podría irrumpir esta misma
madrugada y sus efectos -lluvias intensas y fuertes vientos, «sobre todo
en zonas marítimas»- dejarían de notarse ya por la mañana. La potencial
borrasca extratropical sería también la primera de este otoño invierno,
azotado de momento solo con cierta virulencia por Nicki, el fuerte temporal registrado a mediados del pasado mes de diciembre.
Justo antes de producirse esta ciclogénesis, si
es que finalmente lo hace, también habrá que estar en alerta.
MeteoGalicia activó ayer un aviso de nivel naranja desde las nueve de la
mañana hasta las nueve de la noche de hoy en el interior de Pontevedra
por precipitaciones de más de 80 litros por metro cuadrado. En el resto
de esta provincia, en la de A Coruña y en el noroeste y la montaña de
Ourense la alerta será amarilla (más de 40 litros). El tiempo continuará
desapacible el fin de semana, con avisos mañana por oleaje y nieve en
las zonas más altas.
EA2CPG