Los comités de operaciones de emergencia deberán cumplir las orientaciones correspondientes a esta fase y realizar operativos de evacuación, si la situación lo demandara, a fin de proteger a los habitantes.
Se le sugiere a los pobladores estar preparados para cualquier eventualidad y además tener preparado una mochila de emergencia para una probable salida de sus residencias, unido a una máscara y una bufanda.
Desde el viernes último se registraron explosiones al interior del volcán con emisiones de vapor y ceniza de hasta siete kilómetros de altura.
Según los informes especializados, la zona de influencia del volcán ha llegado a afectar a las localidades de Pujilí, Baños de agua santa, Pondoa, Ulba, Pelileo, Cevallos, Cusua y Cotaló.
Este domingo se reportó una explosión moderada seguida por dos explosiones grandes en el volcán, que provocaron vibración del suelo en lugares cercanos y fueron escuchadas en lugares ubicados a más de 30 kilómetros del volcán.
Por las características que tiene este nuevo ciclo de actividad no se descarta que en los próximos días y horas se produzcan eventos similares, de acuerdo con el más reciente parte.
El último período eruptivo del Tungurahua se inició en 1999, pero tuvo episodios violentos en el 2006, 2008 y 2010.
El volcán es monitoreado las 24 horas del día a partir de seis estaciones sísmicas de banda ancha y otras cinco estaciones.
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