Llegó el agua. ¡Pero de qué forma! Fueron fuertes aguaceros en escasos minutos que provocaron pequeñas pero numerosas inundaciones y que han encendido todas las alarmas. Garajes, viviendas bajas y carreteras sufrieron los efectos de los chaparrones que afectaron a toda Cantabria.
En Santander, por ejemplo, se recogieron 46 litros por metro cuadrado, que unidos al agua caída en la noche del viernes, hizo que en la capital lloviera en un solo día más que en los dos últimos meses. La zona centro de la capital fue, además, uno de los puntos más afectados, debido a la fuerte tormenta que cayó en la madrugada del viernes al sábado (Protección Civil recibió hasta las siete de la mañana 87 llamadas), que anegó las principales arterias de la ciudad, especialmente el túnel de la calle Burgos. Allí, un taxista tuvo que ser rescatado por los bomberos y la policía local al quedarse atrapado su vehículo en medio de una auténtica laguna.
Las tormentas afectaron prácticamente a toda la región. La mayor acumulación de agua se registró en Treto, donde cayeron 53,6 litros por metro cuadrado; en Los Tojos, se midieron 46,8 litros y en Tama, 33,2 litros. Las intensas lluvias obligaron a intervenir en 183 ocasiones a los servicios de Protección Civil del Gobierno cántabro. En Torrelavega, los bomberos registraron una veintena de salidas.
En la capital, además del rescate reseñado, los bomberos tuvieron que proceder a demoler parte de una edificación abandonada, situada en la Bajada de Polio número 8, ya que la acumulación de agua en la cubierta produjo el derrumbe de parte del techo. Los servicios del Ayuntamiento tuvieron que revisar todas las alcantarillas de la ciudad, algunas de ellas levantadas.
En Castro Urdiales, varios vecinos del barrio Laiseca vieron con impotencia cómo las obras de una carretera desviaban sin remedio todo el agua que caía hacia los garajes, que quedaron anegados. En Ampuero fue necesario apuntalar con sacos una pequeña rotura de un muro de contención. En Argoños cuatro locales quedaron inundados y fue necesario evacuar el agua con ayuda de bombas. Y en Revilla de Camargo, una casa quedó anegada por la intensa lluvia.
Desde el pasado día 1 de septiembre sólo había llovido en Cantabria nueve días. El 17, las precipitaciones registradas fueron de 36 litros por metro cuadrado, aunque no llovió en forma de chaparrones.
Atención a la jornada
Junto a las intensas lluvias, Cantabria sufrió en generalizada caída de las temperaturas. Reinosa, por ejemplo, no pasó en toda la jornada de los 7,4 grados y la región tuvo su máxima en la capital con 17,1 grados. La bajada de las temperaturas hizo que nevara a 1.300 metros de altura.
La situación de alerta se mantendrá para hoy. La Agencia Estatal de Meteorología prevé chubascos persistentes, localmente fuertes, y rachas de vientos de hasta 80 kilómetros por hora. Aemet ha establecido aviso importante por lluvias en toda la región, con menor incidencia en las zonas de Liébana y Campoo. La cota de nieve ascenderá hoy de los 1.300 metros a 2.000 metros. Las temperaturas se mantendrán sin cambios importantes. Los vientos serán de noroeste, fuertes en el litoral y en las zonas altas con rachas de 80 km/hora.
La policía y los bomberos tuvieron que rescatar al conductor cuando su vehículo quedó rodeado por el agua.