Los servicios sanitarios empiezan a recuperar su ritmo y ayer lunes el hospital Rafael Méndez, que da cobertura a Lorca y municipios próximos, reabrió sus puertas y puso en servicio una parte de sus instalaciones, a pesar de los muchos desperfectos provocados por los terremotos de la semana pasada que obligaron a su desalojo.
El edificio, según fuentes de la gerencia del hospital, no presenta daños estructurales, aunque se han desprendido falsos techos y azulejos. Con todo, durante esta semana podrían funcionar en su totalidad las dependencias.
En una primera fase están operativos los servicios de urgencias, el hospital de día, los laboratorios, los quirófanos, el servicio prenatal y de suministro del tratamiento anticoagulante Sintrom. Las consultas externas no funcionaban ayer, salvo las que atienden a mujeres embarazadas. Tampoco hay pacientes hospitalizados todavía, pero el servicio de admisión funciona desde el viernes. Las consultas se irán abriendo de forma paulatina.
La actividad en los centros de salud se reanuda también. El de Lorca-San Diego funciona con su servicio de urgencias, y los pacientes del centro de salud de La Viña han sido derivados al centro de salud mental. Los pacientes del centro de salud Lorca-Centro está previsto que hoy martes sean derivados al centro de especialidades de Santa Rosa de Lima. Los consultorios periféricos funcionan con su horario habitual.
El Colegio de Farmacéuticos ha informado de que ya están abiertas 33 de las 36 farmacias de Lorca y pedanías. Siguen cerradas las de Caridad Sánchez, en Urbanización Las Isla; Jesús Martínez y Raquel Martínez, en Santa Quiteria; y Alejandro Domínguez, en Carretera de Granada. La farmacia de Josefina y María Mazzuchelli, en plaza del Trabajo, tiene restricciones.
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