A
partir del día jueves 28 de febrero se registró un paulatino incremento
en la actividad sísmica del volcán. Desde la mañana del 1 de marzo,
dicho cambio en la actividad sísmica es acompañado por la generación de
columnas de emisión con ceniza, explosiones de tamaño pequeño, ruidos,
bramidos de variada intensidad y caídas de ceniza en sectores ubicados
especialmente en la zona sur occidental del volcán Tungurahua.
Luego
del último episodio eruptivo registrado desde el 14 hasta el 30 de
diciembre del 2012, el volcán mantuvo un nivel de actividad sísmica
considerado como moderado-bajo. Este nivel de actividad se mantuvo en
niveles similares, y fue reportado en el Informe Especial n.4 hasta el
25 de Febrero. Entre el 25 y 27 de febrero se contabilizó un máximo de 5
sismos por día, asociados exclusivamente a la movilización de fluidos
al interior del volcán (eventos del tipo largo período, LP). Desde el
viernes 01 de marzo, se incrementó el número de señales asociadas a
movimientos de fluidos (sismos LP o largo periodo), y se han
contabilizado para el día de hoy y hasta el cierre del presente boletín
83 eventos de largo período, 12 explosiones de tamaño pequeño y 8
episodios de tremor de varios minutos de duración, los cuales están
relacionados con las emisiones de ceniza.
Desde
hace varias semanas atrás las condiciones climáticas no han sido
favorables para realizar observaciones permanentes de la actividad
superficial, pero hasta antes del 1 de marzo se pudo establecer que en
la zona del cráter únicamente se presentaban leves penachos de vapor de
menos de 100 metros de altura. Aproximadamente a las 16h00 (tiempo
local) de la tarde de ayer, 1 de marzo, se observó una columna de
emisión de vapor de agua y gases con un contenido moderado a bajo de
ceniza y una altura de pocos cientos de metros sobre el nivel del cráter
que se movilizaba hacia el occidente-noroccidente del volcán.
Asociado
con la mencionada actividad, se han recibido reportes de caídas de
ceniza en la mañana de ayer color negro y granulado, y en la mañana de
hoy, de color gris y tamaño de grano fino, en sectores ubicado al
sur-occidente del volcán, como Choglontús y Manzano. De acuerdo a la
información obtenida de la red de balanzas electrónicas (cenizómetros)
manejadas por los vigías del volcán, y que se mantiene en cooperación
con la Universidad San Francisco de Quito, se ha determinado que la zona
sur-oriental tiene una caída moderada de ceniza (500 gramos por metro
cuadrado ó 0.4 mm de espesor de ceniza) similar a la que ocurrió en este
sector durante la actividad eruptiva del 18 de diciembre del 2012.
Se
han recibido reportes de ruidos y bramidos de moderada y baja
intensidad desde la mañana de ayer. Con la explosión de las 11:06
(tiempo local) de la mañana de hoy se recibieron reportes de un cañonazo
moderado y ruido asociado al rodar de bloques por los flancos del
volcán. Esta explosión es la de mayor tamaño registrado desde el inicio
de este nuevo periodo eruptivo.
Los
datos de las estaciones de inclinometría y de GPS muestran que el
volcán continúa mostrando una deformación moderada en el flanco
nor-occidental del volcán.
Hasta
la publicación de este informe, las condiciones climáticas en la zona
del volcán Tungurahua son adversas para observar la actividad
superficial del mismo. Es posible que las explosiones y la emisión de
ceniza continúen en los próximos días y por tanto la población debe
protegerse de los efectos de ésta y mantenerse atenta e informada sobre
la evolución de la actividad actual.
El
Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional se mantiene
vigilando de manera permanente la actividad del volcán e informará
cualquier cambio de comportamiento a las autoridades y comunidad en
general.