martes, 5 de marzo de 2013

EL TEMPORAL DE CANARIAS CAUSA UN MUERTO

El temporal que durante dos días ha sacudido el Archipiélago se aleja ya hacia la Península dejando tras de sí la muerte ayer de una senderista alemana a la que cayó una piedra en la cabeza, en La Gomera. También deja infinidad de incidencias y problemas en las comunicaciones aéreas y marítimas.
El fallecimiento ayer de una senderista alemana de 26 años a la que le cayó una piedra encima en Valle Gran Rey, en La Gomera, por efecto del fuerte viento y la lluvia mientras transitaba por la pista que une del muelle de Las Vueltas y el barrio de Argaga, en Vallehermoso, ha sido el triste broche al temporal que durante dos días ha afectado a las islas y que hoy se prevé que ya abandone Canarias.
La muerte de la mujer, que fue trasladada aún con vida al Hospital Universitario de Canaria se produjo apenas unas horas después de que el Gobierno de Canarias rebajara ayer tarde la emergencia por vientos en Gran Canaria, Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro a alerta y decretara la prealerta por lluvia y por viento en el resto del archipiélago. Las islas de La Palma, La Gomera y el Hierro también están en situación de alerta por el oleaje. A media tarde de ayer, la Agencia Estatal de Meteorología rebajaba igualmente el aviso por vientos de rojo a naranja en las cumbres de Gran Canaria y la provincia occidental.
Ante la nueva previsión meteorológica, el Gobierno de Canarias decidió ayer que hoy se reanuden las clases en todos los centros escolares del archipiélago, a excepción del IES de La Oliva, en Fuerteventura, donde el viento afectó de manera importante a su estructura.
El temporal de viento, lluvia y oleaje ha sumado infinidad de incidencias que no han revestido mayor importancia como cortes en varias carreteras por el desprendimientos de piedras; cortes eléctricos de horas en distintos puntos; desbordamiento de barrancos; árboles, planchas, invernaderos y vallas arrancados y muros caídos.
El viento y el fuerte oleaje ha  han mantenido prácticamente incomunicadas durante dos días a las islas de La Palma, La Gomera y el Hierro por aire y por mar.
El temporal ha traído además una nueva tempestad política protagonizada por el presidente del Cabildo grancanario, José Miguel Bravo de Laguna, que desdeñaba la declaración de emergencia del Gobierno.