Las autoridades japonesas han detectado una concentración excesiva de cesio radiactivo en las aguas residuales vertidas por una fábrica de cemento a la bahía de Tokio, según ha informado este jueves la televisión estatal, NHK.
El Gobierno de la prefectura de Chiba, donde se ubica la cementera, ha realizado dos mediciones, una en septiembre y otra en octubre, en las que ha registrado 1.103 y 1.054 becquerelios de cesio radiactivo, respectivamente, niveles 15 veces superiores a los permitidos por la Comisión de Seguridad Nuclear.
El Gobierno de la prefectura de Chiba, donde se ubica la cementera, ha realizado dos mediciones, una en septiembre y otra en octubre, en las que ha registrado 1.103 y 1.054 becquerelios de cesio radiactivo, respectivamente, niveles 15 veces superiores a los permitidos por la Comisión de Seguridad Nuclear.
La cementera ha interrumpido el vertido de agua contaminada, mientras las autoridades de Chiba realizan un estudio sobre el conjunto del agua de la bahía de Tokio para determinar el origen del cesio radiactivo.
Al parecer, el agua procede de la limpieza de los filtros que separan los materiales tóxicos de las cenizas utilizadas para producir el cemento.
Desde el accidente nuclear en la central de Fukushima-1, causado por el terremoto y el tsunami del pasado 11 de marzo, las autoridades japonesas han detectado altos niveles de materiales radiactivos en diversos puntos de la costa oriental del país.
EA2CPG