El fuerte temporal de lluvia ha provocado la muerte de tres personas y 2.300 han tenido que ser evacuadas por las inundaciones en el sureste de Francia. Una decena de departamentos se encuentran en alerta por las copiosas precipitaciones caídas durante el fin de semana.
El río Argens y otros se han desbordado y las aguas anegan calles y casas en localidades como Roquebrune-sur-Argens, donde se han grabado imágenes en las que se pueden ver coches flotando y vecinos achicando el fango y el agua de sus viviendas.
Una pareja de jubilados, ambos de 71 años de edad, falleció anoche en la localidad de Bagnols por una intoxicación por monóxido de carbono en una bodega cuando intentaba vaciarla de agua, según la Policía. Ayer, los agentes encontraron el cuerpo sin vida de un vagabundo de 51 años arrastrado por la corriente cerca de su campamento instalado en la región meridional de Herault.
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