Las llamas, visibles en toda la comarca bejarana desde las seis de la tarde, provocaron una importante humareda que apenas dejaba visibilidad a los conductores. Los servicios de extinción trabajan en la zona con medios aéreos y terrestres para evitar que el fuego se expanda
Con el susto todavía reciente por el incendio junto a Saucelle, los servicios de extinción han tenido que desplazarse en la tarde de este sábado hasta la otra punta de la provincia, la comarca bejarana, en el término municipal de Valdehijaderos, donde el fuego ha obligado a cortar la carretera SA-220 desde las 18:00 horas, según informa la Dirección General de Tráfico. El humo y el polvo provocado por el fuego, visible en toda la zona, se ha expandido de tal manera que apenas dejaba visibilidad a los conductores, lo que ha obligado a la Guardia Civil a establecer circulación condicionada en ambos sentidos.Tras declararse el nivel 1 de alerta, debido a que las llamas estaban junto a la carretera, hasta el lugar se desplazaron tres helicópteros de la Junta, cuadrillas ELIF (especialistas en lucha contra incendios), dos helicópteros del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente con dos cuadrillas de la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF), tres autobombas, un bulldozer, dos técnicos, una dotación de los Bomberos de Béjar y dos agentes medioambientales. También se ha solicitado la presencia de dos hidroaviones del Ministerio procedentes de Talavera de la Reina, en Toledo.
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