Las tareas de lucha contra el fuego,
en las que participan alrededor de un centenar de miembros de los
servicios de emergencia, se están viendo retrasadas por la presencia de aviones no tripulados utilizados por medios de comunicación.
«Es importante para nosotros recalcar
que, si alguien está usando 'drones', los saque de la zona», ha dicho
el portavoz de la Policía, Nils Eggen.
Por su parte, el vicealcalde de
Laerdal, Geir Berger Overland, ha indicado que el incendio «es una
catástrofe», tal y como ha recogido la cadena de televisión rusa RT. «Es un infierno para los que están allí. Hay llamas y humo por todas partes, además de un fuerte viento, lo que hace la situación muy difícil», ha valorado.
En la localidad se encuentra la iglesia de madera de Borgund, que data de 1180
y que es la mejor conservada de todo el país. En base a las
informaciones disponibles, el edificio no ha resultado dañado por las
llamas.
La policía ha evacuado el centro de la ciudad, que tiene
1.200 habitantes. Según el alcalde, Han Geir Soldal, al menos una de las
históricas casas de madera está entre las destruidas por el fuego.
