Los primeros incendios forestales de este año en el sur de California se salieron de control, y por el momento sólo se logró controlar el cinco por ciento de un territorio de 6.800 hectáreas en el valle de San Fernando, informó John Mancha, del Departamento de Bomberos de Los Angeles.
En la zona se encuentran desde ayer 3.000 bomberos, 200 carros de agua y diez aviones.
Los cálidos vientos de Santa Ana que aparecen en este momento del año hacen crecer rápidamente las llamas, informó el diario «Los Angeles Times». La superficie incendiada se triplicó ayer en unas pocas horas. El origen del fuego es desconocido hasta ahora.
En la región hay más de 2.000 casas, entre ellas varias mansiones de lujo que están ahora amenazadas por las llamas. Más de 350 vecinos tuvieron que abandonar de forma preventiva sus casas. Decenas de viviendas en suburbios de Los Ángeles se encuentran amenazadas por el fuego, entre ellas mansiones de lujo en el valle de San Fernando.
Según los bomberos, apenas una casa resultó dañada hasta ahora. «Hace mucho calor y la humedad es muy baja», dijo Mancha. «Esperamos que el viento amaine y podamos ganarle al fuego», agregó.
Después de un invierno lluvioso, hay mucha maleza altamente inflamable en el sur de California. Además, los insectos mataron varios pinos, que propagan ahora rápidamente las llamas.
O5AR
