Las labores de búsqueda continuarán hoy a lo largo de toda la jornada a pesar de que fuentes próximas a los responsables del rastreo señalaron que «se prevé una fuerte marejada para las próximas horas que puede complicar los trabajos», de ahí el refuerzo extraordinario de ayer. El operativo se mantendrá al menos dos días más. El trabajo del gran número de efectivos desplegados en la tarde de ayer en toda la costa fue contemplado por numerosos ciudadanos que se acercaron hasta el lugar de los hechos, la bocana del puerto deportivo, para interesarse por las novedades. Los padres del pequeño desaparecido, dos asturianos residentes en Granada, se acercaron también hasta la zona visiblemente conmocionados. José Ramón Diéguez acompañaba posteriormente a otros familiares que iban llegando al puerto también visiblemente emocionados. «Me vi morir, creí que no salía de allí», relató el superviviente poco después del siniestro a sus familiares.
El suceso tuvo lugar alrededor de la una de la tarde del pasado jueves. El militar Luis Carlos Menéndez, un gijonés retirado desde hace un año con pocos meses de experiencia marítima, había salido al mediodía de esa fatídica jornada a pescar con sus dos sobrinos -uno de ellos el niño de 10 años desaparecido- y con un familiar político, José Ramón Diéguez, y el hijo de éste. El infortunio quiso que una ola golpeara la embarcación en la que se encontraban, el «Patri 13», una lancha de reciente adquisición y de 5,8 metros de eslora que acabó volcando. A pesar de la rapidez de los servicios de emergencias, nada se pudo hacer para salvarle la vida a Luis Carlos Menéndez, que fue despedido en un multitudinario funeral que se celebró el pasado viernes en la iglesia de San José de Gijón.
Los dos niños que resultaron heridos en el accidente marítimo fueron atendidos en un primer momento en el servicio de urgencias del Hospital de Cabueñes con claros síntomas de hipotermia. Los menores, que actualmente ya se encuentran en casa de sus familiares y que reciben además ayuda psicológica para superar el trauma, se encontraban disfrutando de las fiestas navideñas en compañía de su tío en Gijón. Sus padres tenían previsto venir el día de la celebración de la Nochevieja desde Granada, localidad andaluza en la que residen desde hace años por cuestiones laborales. En el operativo de búsqueda que se desplegó por toda la costa gijonesa en el día de ayer participaron, además de los funcionarios de las policías Local, Nacional y Portuaria, agentes del grupo de buzos y del helicóptero de la Guardia Civil, operarios de Salvamento Marítimo y Cruz Roja y voluntarios de la agrupación de Protección Civil.
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