Las operaciones de rescate comienzan cada día alrededor de las siete y media de la mañana y finalizan «cuando las condiciones de visibilidad no permiten continuar», tal y como indicó ayer el concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Gijón, Rafael Felgueroso. Además de los funcionarios, en el operativo que se despliega cada mañana por tierra, mar y aire participan voluntarios de Cruz Roja y de Protección Civil. A los trabajos que llevan a cabo más de un centenar de efectivos se sumaron además el pasado lunes una veintena de voluntarios de diversas asociaciones de buzos.
En la mañana de ayer los primeros en salir a la mar en la busca del pequeño desaparecido fueron los operarios de Salvamento Marítimo a bordo del helicóptero «Helimer 204». El delegado del Gobierno en Asturias, Francisco González Zapico, y el teniente coronel de la Guardia Civil de Gijón, Juan Bautista Martínez Raposo, se desplazaron ayer al puerto deportivo para seguir las labores de búsqueda.
La mar gruesa que a lo largo de todo el día de ayer azotó la costa no permitió el trabajo de los buzos. El operativo de rescate lo siguen muy de cerca los familiares del niño desaparecido, que se desplazan con frecuencia hasta el puerto para seguir la evolución de los trabajos que se llevan a cabo en el mar y que también son contemplados habitualmente por los padres del menor desaparecido, que se desplazaron desde Granada y Madrid en cuanto tuvieron noticias del trágico suceso de la costa gijonesa.
Salvamento Marítimo asegura que los trabajos de búsqueda del pequeño «no se van a dejar de lado», al menos, por el momento. «En este tipo de casos no existe un protocolo establecido, la pauta de actuación la dictan las normas de la lógica y se va a seguir buscando mientras sea necesario», señalaron ayer en conversación con este periódico los portavoces de este servicio.
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