Así lo ha indicado la directora del Instituto Geográfico Nacional (IGN) en Canarias, María José Blanco, tras finalizar una reunión del Comité Científico del Plan de Protección Civil por Riesgo Volcánico (Pevolca). Según los datos obtenidos por los científicos, el proceso eruptivo continúa en la zona del Mar de las Calmas y hay una reactivación magmática, aunque este término es aplicable a la actividad volcánica que se registra en la isla desde julio del año pasado.
De acuerdo a las batimetrías realizadas por los buques científicos, en la zona de la erupción hay un cono principal a 120 metros de profundidad, con una base de unos 400 metros de radio, mientras que el segundo cono tiene 75 metros de altura y se encuentra a 200 metros de la superficie.
El primer cono ha aumentado en cinco metros en un mes, desde la última batimetría, y se observa un incremento considerable en el volumen de magma que emite, aunque los científicos no disponen de la cifra concreta, señaló María José Blanco, quien recordó que el último cálculo realizado era de unos 145 millones de metros cúbicos de magma.
"Sigue habiendo sismicidad, deformación (del terreno) y emisión de gases no acorde con un proceso estable y acabado, y por ello se sigue hablando de reactivación", ha dicho la directora del IGN en Canarias, quien ha afirmado que en este ámbito hay que trabajar con "una visión a medio plazo".
El director general de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias, Juan Manuel Santana, ha explicado que se mantiene activada la vigilancia por parte del grupo de vigilancia volcánica de Protección Civil y continúa el semáforo rojo de alerta en la zona de exclusión marítima sobre la erupción, mientras que sigue en amarillo para el resto de la isla de El Hierro.
Además se ha acordado abrir el acceso a la cala de Tacorón una vez que haya conexión con la sala operativa del 112 para recibir los datos en tiempo real de los sensores de calidad del aire allí instalados.
El director general ha detallado que en la isla continúan los retenes de Cruz Roja pero se ha acordado retirar a la Unidad Militar de Emergencias porque no hay riesgo "inminente" para la población, aunque en caso necesario podría desplazarse en 24 horas a la isla.
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