La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD, gubernamental) aclaró que el número de desaparecidos es de once, dos más que lo anunciado previamente.
Asimismo, la portavoz de la UNGRD, Sandra Calvo, dijo a Efe por teléfono que los organismos de socorro en el área del desastre también precisaron hoy que los muertos son cuatro y no cinco, como informaron el sábado.
"Nos dijeron que creyeron haber avistado otro cadáver, pero no lo encontraron", agregó la portavoz.
Seis personas resultaron heridas por la avalancha, que destruyó trece casas, causó daños a otras veinte y dejó al menos 165 personas damnificadas, según los informes de la UNGRD.
Más de 150 socorristas y voluntarios de la Defensa Civil Colombiana (DCC) y la Cruz Roja Colombiana (CRC), así como uniformados de la Policía Nacional y el Ejército Nacional, participan en las tareas de rescate, según un comunicado de la UNGRD.
La tragedia tuvo lugar en Villa del Prado, aldea rural de Isnos, y fue causada por una creciente de la quebrada La Chorrera que también afectó el caserío vecino de Remolinos.
Además de la ayuda enviada el sábado a los damnificados, el Gobierno colombiano prepara una brigada del Ministerio de Salud para prestar asistencia a los afectados por la creciente causada por las lluvias.
La tragedia se registró a las cinco de la mañana, cuando todos los moradores del caserío, compuesto por unas 22 viviendas, apenas despertaban para iniciar las labores rutinarias de un día de mercado.
Solo uno pocos lograron salir corriendo de sus viviendas llamando de manera desesperada a sus vecinos para que abandonaran sus casas tras el peligro que se les venía encima sin darles tiempo a reaccionar.
“Yo llamé a todos a grito entero tratando de advertirles, pero muchos se negaron diciendo que no pasaría nada, fue cuando la avalancha de inmensas rocas, lodo y tierra cubrió la mayor parte del caserío”, dijo José David Samboní, uno de los sobrevivientes.
Un infierno
De acuerdo con los moradores del pequeño caserío, fue en cuestión de minutos que la furia de la naturaleza sepultó el lugar convirtiendo lo que eran huertas y pequeñas parcelas con sus respetivas viviendas en un cúmulo de piedras, arena y lodo.
Los vecinos de la parte alta de la vereda escucharon el ruido ensordecedor de la avalancha pero no pudieron hacer nada por advertirle a sus familiares y amigos, pues el aluvión fue mucho más rápido que sus gritos desesperados.
“Yo escuché el estruendo de la quebrada, grité lo más que pude y corrí hacia acá, pero cuando llegué encontré todo totalmente destruido”, asegura Fernando Chicangana, quien perdió a su tía Lidia Chicangana, tres sobrinos: Cristian, Lina y Diego Cerón, y al esposa de su tía, Segundo Cerón.
Esperando apoyo
El alcalde de Isnos, médico Juan Carlos Torres, aseguró que ante la magnitud de la tragedia solo le queda esperar la solidaridad de los municipios vecinos y el apoyo del Gobierno Departamental y el poder central para atender de manera adecuada las familias que resultaron afectadas.
“Por ahora, con el apoyo del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del lugar y algunos organismos de socorro de Pitalito, estamos tratando de encontrar los cuerpos de las personas que perecieron y si llegara a haber sobrevivientes, pues rescatarlos, pero necesitamos de la solidaridad para poder atender a quienes lo han perdido todo”, dijo el mandatario.
Las víctimas mortales fueron trasladadas a las funerarias Divino Niño, La Cruz y Señor de Los Milagros.
Desaparecidos
Entra tanto, se reportan como desaparecidos los integrantes de la familia Cerón Chicangana: Lidia Rocío, madre; Segundo Cerón, padre; y sus hijos Cristian y Diego Andrés. De igual manera no aparecen Luz Miriam Santiago, esposa de Ramiro Zúñiga, Sandra Zúñiga, Luisa Fernanda, Liceth Melisa Chicangana, Tatiana Cerón, Luis Alonso Cuspián y Olivo Guerrero
HeridosEn los hospitales de Pitalito y San Agustín reciben atención médica Sharic Muñoz Cerón, 8 años; Blanca Zúñiga Santiago, 8 años; Javier Zúñiga Santiago, 9 años, y Nelson Gustavo Zúñiga, 10 años. Ever Esteban Muñoz Cerón y Néstor Gustavo Zúñiga se encuentran en el hospital de Isnos.
Suspendida la búsqueda
Gilbert Muñoz, comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Isnos, dijo que debido a la falta de recursos técnicos y maquinaria para la remoción de rocas y escombros, y a la fuerte lluvia que persiste en la zona, se ordenó la suspensión de las labores de búsqueda a la espera de mejor tiempo y condiciones para proseguir la penosa labor.
A las 5 de la mañana de hoy domingo se reactiva la búsqueda, esta vez con un equipo de rescate de 20 hombres especializados y acompañados de perros expertos, al igual que de tecnología para detectar cuerpos, equipos electrónicos y sonidos bajo la tierra.
Campaña Humanitaria
En el sur del Huila se adelanta una campaña humanitaria presidida por la Policía, donde se pide colaboración a los ciudadanos de alimentos no perecederos, productos de aseo, mercados, implementos de cocina, ropa, zapatos.
Asimismo, se llevó a cabo un comité de emergencias presidido por el alcalde Torres, el gobernador encargado Julio César Triana; el comandante a nivel nacional de bomberos Leonardo Suárez Caicedo, comandante de la Policía Huila, coronel Francisco Peláez y el comandante del Cuarto Distrito de la Policía, coronel Jairo Vaquero Puentes.
Testimonios
Mauro Garzón, hijo de Julia Pialejo, quien pereció en los hechos y quien esperaba en la funeraria el cuerpo sin vida de su madre, relató que en segundos la naturaleza les arrancó lo poco que poseían.
“Nos quedamos en la calle, la avalancha nos dejó sin nada y lo peor nos quitó a nuestra mamita… yo me encontraba en la calle, mientras que mi mamá y mi hermano habían salido hacia la cocina cuando pasó la avalancha. Mi mamá quedó inconsciente, reaccionamos entre el lodo y a mi mamita la avalancha se la llevó hasta el Magdalena y fue rescatada sin vida en la vereda Versalles de Pitalito”, narró.
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