Pese a que poco a poco las poblaciones más afectadas están volviendo a la normalidad, en Vidángoz persisten los problemas en el abastecimiento de agua, y en las carreteras de la zona, de las que permanecen cortadas la NA-2130, de Güesa a Vidángoz, a causa de un socavón en las proximidades de Igal, y la NA-2011 (Salazar-Francia) en el kilómetro 8 (puerto de Larrau) cerca de la frontera con Francia, a causa de un desprendimiento.
La Agencia Navarra de Emergencias mantiene activado el nivel de prealerta por inundación en la Merindad de Sangüesa al prolongarse por parte de la AEMET la alarma roja por el riesgo extremo de precipitaciones intensas en los valles pirenaicos.
partir de las 18 horas el nivel de alerta pasa a ser naranja por el riesgo importante de precipitaciones de hasta 100 litros en 12 horas.
El Centro de Navarra, la vertiente Cantábrica y la Ribera se encuentran en situación de alerta naranja por posibles precipitaciones que acumularían hasta 80 litros en 12 horas, y en toda la Comunidad Foral existe el riesgo (nivel amarillo) de lluvias de hasta 20 litros en una hora.
En estos momentos la situación es de calma después de que entre las 11 y las 12 horas de ayer se registrase el pico máximo de caudal en los ríos.
Las precipitaciones, que en algunos puntos han acumulado más de 140 litros por metro cuadrado en sólo 5 horas, se han concentrado en el límite noreste de Navarra, en la zona delimitada por una línea que pasaría por Ochagavía, Vidángoz y Burgui.
Los bomberos de la Agencia Navarra de Emergencias, en especial los de los parques de Navascués y Sangüesa, permanecieron durante toda la jornada de ayer realizando tareas de salvamento, achique y limpieza en las localidades en las que se concentraron las máximas precipitaciones, como Navascués, Burgui, Izalzu, Igal, Ochagavía, Esparza de Salazar y Vidángoz.
MÁS DE 140 LITROS POR METRO CUADRADO Las fuertes lluvias caídas en la noche del jueves y durante la mañana de ayer en el noreste de Navarra, en los valles de Roncal y Salazar y en la Merindad de Sangüesa, donde llegaron a acumularse más de 140 litros por metro cuadrado en solo cinco horas, ocasionaron inundaciones en bajos y viviendas y provocaron cortes de carretera y múltiples incidencias menores que hicieron precisa la intervención de los servicios de emergencia del Gobierno.
Entre las actuaciones que realizaron ayer los servicios de emergencia cabe destacar la evacuación del Colegio Público de Roncal, por una nube tóxica originada tras la explosión de una bombona en el río Eska, a la altura del centro educativo. Dos alumnos tuvieron que ser atendidos en el Centro de Salud por presentar síntomas de rinitis y dificultades respiratorias de carácter leve. Como medida preventiva, el Departamento ordenó asimismo el adelanto de la hora de salida de los centros escolares de Ezcároz, Lumbier, Otsagabia y Sangüesa. También hubo que proceder al rescate en helicóptero de tres personas, dos en Burgi y otra en Otsagabia, que habían quedado atrapadas en sus vehículos y cercadas por las aguas.
Esta última localidad, junto con Izalzu, Burgi, Roncal, Vidángoz (aislada por un corte de carretera y con problemas de suministro de agua que continuaban al cierre de esta edición) y Yesa (donde en 12 horas se registraron 137,6 litros por metro cuadrado) fueron las más afectadas por el temporal.
Durante la tarde, las lluvias cesaron y ello permitió ir recuperando poco a poco la normalidad. Vecinos y bomberos de la Agencia Navarra de Emergencias se dedicaron a limpiar los puentes que habían quedado obstruidos tras las crecidas, y personal del Servicio de Conservación de Carreteras trabajó en el acondicionamiento de las calzadas afectadas. A última hora de la jornada, solo permanecía cerrada la NA-2130, de Guesa a Vidángoz, en el término de Igal (kilómetro 1,8), por hundimiento parcial del firme.
lluvias torrenciales Los datos registrados en las estaciones meteorológicas del Gobierno y los que consignó la Confederación Hidrográfica del Ebro reflejan la virulencia de las precipitaciones. Entre las 20 horas del jueves y las 8 de ayer se recogieron 120 litros por metro cuadrado en Navascués; 110,8 en Javier, 103 en Isaba, 80,6 en Esparza de Salazar y 78,8 en Espinal.
El caudal que registraban algunos ríos de la zona por la tarde también da fe de la cantidad de lluvia caída. A la altura de Aspurz, el río Salazar presentaba un caudal de 178,61 metros cúbicos por segundo y el Irati, a la altura de Liédena, arrastraba 254,70 metros cúbicos, cuando el caudal del Ebro, por ejemplo, a su paso por Zaragoza, era de 55 metros cúbicos.
vías afectadas El desbordamiento de los ríos, la presencia de balsas de agua y la caída de árboles y ramas provocaron numerosos problemas en las carreteras. Se vieron afectadas la NA-137, en las cercanías de Burgi; la NA-140, a la altura de Izalzu; la NA-2130, entre Burgi, Vidangoz e Igal y Vidángoz; la NA-2420 (Torres de Elorz-A-21), en las cercanías de Liédena; la NA-5340 (Sangüesa-Gabarderal-Cáseda), entre Sangüesa y Gabarderal; la NA-140 (Burguete-Isaba), en las inmediaciones de Otsagabia y de Uztárroz; la NA-5390, en las inmediaciones de Figarol; la NA-5410 (Sangüesa-Yesa), en Javier, y la NA-2011 (Salazar-Francia), cerca de la frontera, a consecuencia de un desprendimiento.
El director general de Administración Local del Gobierno de Navarra, Francisco Pérez Arregui, se desplazó en la mañana de ayer a algunas de las localidades afectadas para realizar una primera estimación de los posibles daños sufridos en infraestructuras de su competencia. En los próximos días, técnicos de este departamento también visitarán la zona para atender las demandas de las entidades locales.
EA2CPG