«Todo ha sido rapidísimo»,La joven fue ayer testigo directo de cómo un incendio destrozaba una vivienda situada en el portal número 50 de la calle Alta. La parte trasera del inmueble da a la calle Isaac Peral, donde María tiene su negocio. Tanto ella como los vecinos de la zona contemplaron atónitos cómo el fuego devoraba el piso. «De repente ha empezado a salir humo. Luego hemos visto las llamaradas y trozos de persianas y cristal que caían en la acera», explica. Sobre las cinco de la tarde, varias personas avisaban a Emergencias. El mensaje era idéntico: un piso de la séptima planta del céntrico edificio estaba ardiendo.
Minutos después, tres dotaciones del Parque de Bomberos de Santander (dos motobombas y una escala) y efectivos de la Policía Local y Nacional se personaron el lugar del suceso. Cuando se originó el incendio, cuyas causas se desconocen, la vivienda estaba ocupada por una mujer joven y sus tres hijos -menores de edad-, que pudieron salir por su propio pie. Sin embargo, una de sus mascotas, una perra, fallecía en el interior del piso.
El portal número 50 de la calle Alta era un auténtico hervidero. Vecinos y curiosos se arremolinaban en torno a la mujer y sus pequeños. Mientras los menores eran atendidos allí mismo por los efectivos sanitarios, la mujer fue trasladada al Hospital Marqués de Valdecilla, debido a una fuerte crisis de ansiedad.
Miedo y asombro se mezclaban en las caras de los vecinos. Uno de ellos, que prefirió no revelar su identidad, explicó que oyó «una explosión» y vio «cómo salían despedidas las persianas». Algunos de los 56 residentes del edificio bajaron por sus propios medios, alertados por el humo. A otros les avisaron los bomberos: «Nos dijeron: o se quedan dentro o salen pitando», cuenta uno de ellos.
Origen desconocido
Samuel Ruiz, concejal de Protección Ciudadana del Ayuntamiento de Santander, aseguró que se desconocían las causas del siniestro y que la encargada de averiguar lo ocurrido será la Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía. El edil comentó que la habitación donde se declaró el incendio -cuyo ventanal daba a la calle Isaac Peral- quedó «completamente destruida». Además, las altas temperaturas causaron «graves daños en el resto de la vivienda».
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