Rescatistas, soldados y policías evacuaron a unas mil personas
de automóviles y autobuses atascados bajo la nieve en el norte de Serbia
pero varios centenares siguen atrapados, informó el Gobierno.
Las
autoridades cerraron varios caminos e impidieron el tráfico en el río
Danubio debido a intensas ráfagas de viento, dijo la declaración
oficial.
"El gobierno serbio insta a los ciudadanos a no viajar hasta que se despeje completamente el peligro", agregó.
El
invierno hasta ahora había sido excepcionalmente tibio en Serbia, pero
durante la semana que termina, partes de Europa central y oriental se
han visto azotadas por una serie de tormentas de nieve. Las intensas
nevadas en Bulgaria dejaron a varios pueblos sin electricidad ni agua y
las autoridades rumanas declararon una severa advertencia sobre el
tiempo el miércoles.
Las autoridades de emergencia en Serbia
informaron que decenas de automóviles y dos trenes de pasajeros
permanecían atascados en el norte del país, una zona plana donde los
vientos han formado montículos de nieve, aislando pueblos y bloqueando
carreteras.
El viceprimer ministro Aleksandar Vucic, candidato a
pasar a primer ministro después de las elecciones de marzo, visitó la
zona junto con otros ministros del gobierno. Vucic dijo que había una
decena de filas de automóviles todavía atrapados.
Vlatko
Jovicevic, uno de los pasajeros atascados, dijo a la emisora B92 que
había estado paralizado durante más de 20 horas. "Caminé dos kilómetros
para conseguir más combustible y un poco de agua", afirmó. "Nos estamos
quedando sin gasolina".
La acumulación de nieve debido a las
ráfagas de viento asciende en algunos sitios a 3,5 metros (11,5 pies),
lo que llevó a las autoridades a cerrar el principal cruce fronterizo
con Hungría.
La empresa ferroviaria estatal dijo que evacuaría a
varias decenas de pasajeros atrapados en dos trenes en la ruta
Serbia-Hungría.